Ecce Homo sin duda marcó un antes y un después en la historia del arte en España. Cecilia Giménez es la autora de uno de los mayores despropósitos artísticos que se recuerdan. La restauración de un fresco que se encuentra en la iglesia del pueblo zaragozano de Borja y que ella se prestó a rehabilitar y devolver a su anterior estado.
Con el consentimiento del ayuntamiento y sin tener absoluta idea de pintar, la buena de Cecilia se metió a repintar el mural. Unas semanas después, el resultado asombró al mundo, literalmente. La restauración del Cristo de Borja se había hecho famoso a nivel global. También su autora, que lamentablemente ya falleció. Pero la obra de Cecilia no ha sido la única restauración que ha dado ganas de llorar.
Aquí os traemos una lista de obras que te van a saltar más de una lágrima, y no por el síndrome de Stendhal.
6La caricatura turca
No solo los frescos, los cuadros y las tallas sufren atentados. Esta obra que se encuentra en Turquía y es de origen romano también sufrió su particular restauración. En este caso vemos que la obra original y la restaurada no dista demasiado, pero hay ciertas partes que parece que pillaron en un mal día a los autores y de ahí que haya tenido este resultado.
Si cuentas con el desconocimiento histórico del restaurador y que ese día en el almacén no hay azulejos del color exacto que se necesita, pues sale una caricatura que parecería hecha por Manolo y Benito. La expresión facial del mosaico es indescriptible, al igual que la horrorosa línea azul que cruza el pecho del personaje protagonista.
Como dice el refrán “Manolete, si no sabes torear, pa’ qué te metes”. En el caso de las obras artísticas, a veces es mejor gastarse algo más y que sean restauradas por profesionales que destrozarla definitivamente.