Objetos que tienes que mirar dos veces porque parecen tener vida

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Algo que hemos hecho todos alguna vez en la vida es tumbarnos en el suelo, mirar al cielo y empezar a sacar parecidos a las nubes. También nos ha sucedido que de una mancha en la pared hemos sacado una cara o la figura de un ser humano. Pero sin duda las que más nos sorprenden son las que debemos mirar varias veces porque parecen caras de personas. Todo esto no es raro y tiene nombre científico. Pareidolia.

La pareidolia tiene un fundamento lógico que ha sido explicado por el neurocientífico Colin Palmer en la revista Science Alert. La pareidolia se da cuando nuestro cerebro intenta reconocer un patrón de una cara en un objeto inanimado. Es decir, no vemos una cara, si no que nuestra mente intenta reconocer una cara. Y esta habilidad no es únicamente humana. Se sabe por varios estudios que los monos Rhesus también pueden percibir caras en objetos que realmente no lo son.

Reconocemos caras para intentar ver el estado emocional de las personas y nosotros os traemos una serie de objetos que habrá que mirar dos veces para darnos cuenta de que no son caras.

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Caras en Marte

Una de las pareidolias más extrañas de la historia se dio con una imagen realizada por la sonda Viking 1 en el año 66. Esta sonda se encargaba de fotografiar la región marciana de Cydonia y apareció lo que vemos, una extraña cara en una de las mesetas.

En realidad, lo que vemos no es una cara de un marciano, tan solo son los accidentes geográficos de una meseta unidos a una lente que no da la mejor calidad. En el año 2001 otra sonda fotografió la misma zona a mayor resolución y desmintió uno de los mayores misterios del planeta rojo.