Nos está tocando vivir una época de pandemia. Parece que todos los científicos están buscando una vacuna y una solución al virus. Sin embargo queda un grupo de valientes que sigue desarrollando otros estudios. Un grupo de investigadores de la Universidad de Standford, California, acaba de publicar un estudio sobre el momento en el que el cuerpo empieza a envejecer.
Así que si tenías establecido que la vejez empieza a los 65, cuando te jubilas, no es así. Tampoco es un indicador el que te empiecen a salir canas antes de los 30. Ni siquiera que tengas lumbago antes de los 40 o que empieces a tener pérdidas de memoria y de fluidos antes de los 50. Realmente el envejecimiento, según estos científicos, empiezan en nuestro interior.
Las proteínas de la sangre
Según el estudio de estos médicos, son las proteínas que contiene nuestra hemoglobina las que indican el mejor estado de nuestro cuerpo. El estudio se ha centrado en 373 proteínas que circulan por nuestra sangre. Y las muestras analizadas pertenecen a 4.263 personas entre 18 y 95 años.
Según los científicos, las proteínas de las células son los que marcan los cambios en tu cuerpo y cuando éstas se modifican, también tú mismo cambias. Así que el estudio concluye que estas proteínas, que viajan desde los tejidos hasta la sangre son las que causan que nuestro cuerpo se deteriore y envejezca.
Estos cambios en las células se dan en tres momentos de la vida en la mayoría de las personas. El primer cambio se observa a los 34 años. La segunda variación se da a los 60 años y no es hasta los 78 cuando se da el tercer y definitivo cambio en las proteínas. Así que es a los 34 años cuando hemos alcanzado el pico máximo y cuando nuestro cuerpo comienza a envejecer.
Se han establecido estos tres escalones porque es en ellos en los que se ha observado un cambio drástico en las proteínas de la mayoría de las personas que tenían esa edad en el experimento. Así pues, las células han permanecido constantes en las otras edades y cuando se llega a los 34, se nota un aumento o una disminución y es cuando nuestro cuerpo comienza a tener un bajón físico.
Margen de error
Los científicos también han admitido que no es completamente exacto y que existe un margen de error en la edad en la que se dan estos cambios protéicos en la sangre. Pero este margen tampoco es muy grande y es de 3 años. Podemos empezar a envejecer a una edad de entre los 31 y los 37. El segundo escalón se daría entre los 57 y los 63. El tercer escalón, se vendría a darse con un margen de edad entre los 75 y los 81.
Otro dato muy curioso que dejó este estudio es acerca de lo saludables que parecían ciertas personas. Y es que aquellos que cuya edad prevista era mucho menor a la que tenían realmente, destacaban por estar en muy buen estado de salud.
Las muestras de las personas fueron generadas en dos grandes estudios. El estudio LonGenity estaba conformado por judíos Ashkenazi de gran edad. Esto les permitió a los científicos recoger muestras de personas hasta los 95 años. Para este estudio no hacían falta grandes cantidades de sangre, de hecho con tan solo una gota, los investigadores eran capaces de identificar hasta 1.379 proteínas de cada persona.
De estas más de 1.300 proteínas, eran 373 las encargadas de predecir la edad de los participantes con gran precisión y las que sufren los cambios cuando se llegan a los escalones de envejecimiento.