Pablo López es uno de los artistas que, cada vez que actúan en el Festival Starlite, consiguen un llenazo espectacular. Y es que, como buen malagueño, el cantante juega con ventaja. Como él mismo confiesa, significa una vuelta a casa y en la cantera marbellí, con su inseparable piano al lado, se siente como uno más de la familia.
Anoche, Pablo López vivió otro de esos días mágicos ante su público, que no dejó de jalearlo durante toda su actuación, una catarsis del artista y la persona. Con el piano como único compañero y, apoyado en mil y una anécdotas y pensamientos compartidos con su público en voz alta, el malagueño fue desnudándose, adentrándose en su yo más profundo y ofreciéndose sin máscaras ante sus incondicionales, cantándole a esas personas «que no escuchan con las orejas, sino con el pecho».
Para abrir el espectáculo, Pablo eligió la canción «Starlight» de la banda británica Muse, en claro homenaje al festival. Natural y cercano, el cantante dedicaba unas emotivas palabras a su público incondicional: «Me gusta mucho la música, me gusta mucho tocar. Por eso me siento muy afortunado de estar aquí, porque Starlite es el único sitio que vayas donde vayas lo conocen. Siempre agradecido de cantar en esta cantera que está pintada de música porque aquí me dejan ser libre«.
Si queréis disfrutar de un fragmento de este concierto único, en el que el malagueño ha vuelto a conseguir encoger los corazones de todos los que tuvieron la suerte de presenciarlo en directo, no os perdáis el siguiente vídeo, en el que Pablo consigue emocionarnos con esa magia tan suya y ese chorro de voz que le ha hecho consolidarse como uno de los más grandes.