A lo largo de la historia de la humanidad, muchas han sido las nuevas modas que no han dejado indiferente a nadie. Si a muchos nos sorprendió en su día ver a los jóvenes con los pantalones casi en los tobillos o que llevaran la capucha de la sudadera puesta hasta en verano, vas a alucinar con las modas de antaño. No te pierdas la evolución de este movimiento y tal vez veas que en el fondo, el fin no difiere tanto de las modas de estos últimos años: la búsqueda de la belleza por encima del sufrimiento.
Ya desde la edad prehistórica, el hombre se vio en la necesidad de vestirse con pieles de animales muertos. La diferencia con los tiempos modernos era que se vestían para resguardarse del frío y no para ir con estilo ni a la moda. Digamos que por aquel entonces, el ser humano no había descubierto que, tras la ventaja de ir vestido, podía sentirse mucho mejor consigo mismo teniendo un aspecto diferente. Con el paso del tiempo, la importancia de un look elegante ha cobrado tanto peso que va creciendo a la velocidad de la luz.
3La belleza de unos pies diminutos
Fue China la precursora de esta cruel práctica. Desde la temprana edad de siete años, a las niñas se les vendaban los pies, de manera que los dedos quedaran por debajo de la planta. Esto les ocasionaba además de un terrible dolor, deformidades y fracturas.
Muchas veces, debido a la falta de circulación sanguínea, tenían que amputarles el miembro. Para ellos, gracias a sus inexplicables creencias, la belleza de una mujer estaba en unos diminutos pies. Por suerte en el año 1912 se prohibió esta tortura (valga la ironía) China.