Los inspectores y subinspectores de Trabajo han pedido a la Dirección General del organismo autónomo de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social que elabore un protocolo para evitar los contagios de Covid en sus visitas a las empresas.
En un comunicado conjunto, el Sindicato de Inspectores de Trabajo y Seguridad Social, junto con Fesess, Sislass, Adi y Seslaess han subrayado que la realización de este protocolo es urgente ante el volumen de carga de trabajo de los inspectores tras la aprobación, el pasado mes de julio, del Real Decreto que establecía medidas urgentes de prevención, contención y coordinación para hacer frente a la crisis sanitaria.
Esta demanda de los inspectores y subinspectores obedece a los hechos acaecidos recientemente respecto al personal con funciones inspectoras en el desarrollo de sus visitas en la provincias de Lleida, Huesca y Málaga, en las que este personal ha estado en contacto directo con trabajadores afectados por coronavirus o han tenido posibilidad real y directa de contagio.
También piden que se realicen test PCR al personal con funciones inspectoras cuando como consecuencia de la realización de su trabajo hayan estado en contacto con personas que hayan resultado positivas por coronavirus o si han tenido posibilidad de contagiarse.
«Tal medida se hace a todas luces imprescindible como modo de paralización ante un contagio real así como medida preventiva de propagación», dice el comunicado, que resalta también que actualmente el personal con funciones inspectoras constituye «un vector de transmisión del virus, con el efecto multiplicador que ello implica, tanto para el resto de empleados públicos, como para las personas con las que los inspectores de Trabajo se tienen que relacionar al desarrollar sus funciones».
Los inspectores dejan constancia de que no realizarán funciones inspectoras si hay riesgo real de contagio hasta la constatación del resultado negativo a través de la realización de test PCR.
Los sindicatos de este colectivo también instan a adoptar medidas de desinfección y limpieza de las sedes de las Inspecciones Provinciales en las que haya estado personal con funciones inspectoras que haya tenido contacto con personas afectadas por el Covid o donde hubiese posibilidad real y directa de contagio.
En este sentido, exponen que, por su actividad profesional, los inspectores un día están en el campo con unos temporeros y al día siguiente en una empresa con un brote por coronavirus. «Vamos con EPIs, pero deberían hacernos PCR cuando vamos a sitios de riesgo o donde hay positivos», han concluido.