La televisión puede parecer un lugar idílico para trabajar. Buenos sueldos, fama, estabilidad…Pero no todo son ventajas y facilidades. Existen los despidos como en cualquier otro sector. Si no satisfaces a tu jefe o a la audiencia, te vas a la calle. Y de la noche a la mañana, sin contemplaciones. Una temporada puedes estar en lo más alto y al año siguiente te ves yendo a fichar al paro. La voluntad y los gustos del público son inescrutables.
Y en los últimos tiempos no se trata solo de eso. La corrección política y la nueva sensibilidad hacia ciertos temas puede hacer caer a una estrella. Un comentario fuera de tono o una actitud reprochable pueden hundir la reputación de un presentador y de una cadena. Hay que andarse con pies de plomo y medir muy mucho las palabras. Se puede pensar que es el presentador quien tiene al público en su mano, pero la realidad es la contraria.
En los últimos años han sido más que frecuentes los despidos fulminantes de presentadores y colaboradores de programas. También de los informativos. Aquí repasamos algunos de los despidos más sonados e inesperados en la pequeña pantalla.
6Máxim Huerta
Máxim Huerta, el que fuera Ministro de Cultura durante apenas unos días, se quedó sin programa en TVE el pasado mes de mayo. El escritor había regresado a la televisión en julio de 2019, siendo presentador del matinal “A partir de hoy”. Huerta estaba muy ilusionado con su espacio, pero la alegría no le ha durado ni un año.
A comienzos de mayo, en plena pandemia, Televisión Española anunció que prescindía de sus servicios sin más explicaciones.
«He sido muy feliz presentando ‘A partir de hoy’ pero la aventura ha llegado a su final. Gracias a RTVE por volver a confiar en mí. Gracias al equipo y a todos los invitados. De momento, os espero el 19 de mayo con mi nueva novela ‘Con el amor bastaba’. GRACIAS por el cariño», escribió Huerta en su cuenta de Twitter.