La televisión puede parecer un lugar idílico para trabajar. Buenos sueldos, fama, estabilidad…Pero no todo son ventajas y facilidades. Existen los despidos como en cualquier otro sector. Si no satisfaces a tu jefe o a la audiencia, te vas a la calle. Y de la noche a la mañana, sin contemplaciones. Una temporada puedes estar en lo más alto y al año siguiente te ves yendo a fichar al paro. La voluntad y los gustos del público son inescrutables.
Y en los últimos tiempos no se trata solo de eso. La corrección política y la nueva sensibilidad hacia ciertos temas puede hacer caer a una estrella. Un comentario fuera de tono o una actitud reprochable pueden hundir la reputación de un presentador y de una cadena. Hay que andarse con pies de plomo y medir muy mucho las palabras. Se puede pensar que es el presentador quien tiene al público en su mano, pero la realidad es la contraria.
En los últimos años han sido más que frecuentes los despidos fulminantes de presentadores y colaboradores de programas. También de los informativos. Aquí repasamos algunos de los despidos más sonados e inesperados en la pequeña pantalla.
2Santi Acosta
Por motivos muy diferentes fue cesado Santi Acosta. El presentador llevaba años al frente de “Buenos días, Madrid”, el programa matinal de la cadena regional de Madrid. En mayo de 2018, y sin previo aviso, Telemadrid anunció que Acosta dejaría de ser el rostro visible del espacio.
La razón fue la participación de Santi Acosta en un acto de Ciudadanos en Madrid. La cadena anunció que lo apartaba “temporalmente” alegando que no quería que ninguno de sus presentadores se vinculase abiertamente a un partido político.
Acosta no comunicó a su empresa la intención de participar en dicho acto, lo que no sentó bien en la cúpula de la cadena. “Telemadrid no está dispuesta a que se juzgue su independencia política e imparcialidad”, decía el comunicado. Además, calificaron de “inapropiada su presencia frente a las cámaras tras haberse relacionado públicamente con Ciudadanos”.
