Las escenas de sexo son uno de los momentos más comprometidos para los actores. Salvo que hablemos de cine pornográfico, se trata de escenas simuladas en las que los actores deben lograr transmitir una pasión y excitación que en realidad no están sintiendo, y hacerlo además rodeados de gente y de focos.
Forma parte de su trabajo. De su profesionalidad como actores. Y, si se piensa bien, tampoco las muertes, las heridas u otras tantas situaciones son reales cuando de lo que se trata es de cine. Sin embargo, para algunos directores, obsesionados con obtener el máximo realismo para sus escenas, no es suficiente. Y no son pocas las películas en las que se han incluido escenas de sexo real.
En una de esas ocasiones de forma además controvertida, si no directamente criminal…
59 songs (9 canciones)
Estrenada en 2004, esta película de Michael Wintterbottom. Es una película particular, rodada en vídeo digital y sin ningún tipo de guión. Lo que busca el director es la máxima naturalidad y ese afán lo traslada también a las escenas de sexo.
Los dos actores, Kieran O’Brian (Matt en la película) y Margo Stilley (Lisa), sabían el reto al que se enfrentaban y, de hecho, ensayaron antes de decidir si seguían o no con la película.