Iberdrola ganó 1.845 millones hasta junio, un 12,2% más

Iberdrola registró un beneficio neto de 1.845 millones de euros en el primer semestre de 2020, lo que supone un incremento del 12,2% con respecto a los 1.644 millones obtenidos en idéntico periodo de 2019.

Según informa la eléctrica a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el beneficio neto recoge impactos negativos de la Covid-19 por importe de 153 millones de euros por el efecto sobre la demanda y las provisiones por insolvencias.

De hecho, en el segundo trimestre del año el beneficio neto descendió un 13,6%, hasta 587,9 millones de euros.

A este respecto, la eléctrica destaca que la demanda y los precios comienzan a recuperarse en España y el Reino Unido, al tiempo que países como Estados Unidos y Brasil comienzan a implementar medidas regulatorias de compensación, con las que el grupo espera recuperar unos 70 millones de euros.

Sin embargo, la mejora en las ganancias hasta junio se explica por el mantenimiento de la actividad en los últimos doce meses, con inversiones de 8.237 millones de euros y 4.900 nuevos megavatios puestos en explotación en dicho periodo; la diversificación geográfica y de negocio y la mejora de la eficiencia. También por las plusvalías de 484 millones obtenidas de la venta de la participación en Siemens Gamesa.

Por su parte, el beneficio bruto de explotación (Ebitda) fue de 4.918 millones de euros, un 1,4% inferior al de hace un año (4.989 millones). Sin el impacto del Covid ascendería a 5.075 millones, un 4,2% más.

En términos de Ebitda, se produjo crecimiento en los negocios de renovables (+5,3%) y generación y clientes (+14,3%) y menor aportación del área de redes (-10,6%).

La compañía tiene ahora 7.500 nuevos megavatios en construcción y ha invertido 3.582 millones de euros en el semestre, un 2,3% más, en línea con el objetivo de invertir 10.000 millones de euros en 2020.

Iberdrola continúa además aumentando su cartera de proyectos con su estrategia de crecimiento en renovables a través de operaciones corporativas en Australia (oferta por Infigen Energy), Suecia (acuerdo Svea Vind Offshore para el desarrollo de hasta 9 gigavatios de eólica marina) y Francia (adquisición de Aalto Power).

Todo ello sitúa la cartera renovable de Iberdrola en 58.000 MW, de los que un 60% se sitúa en Estados Unidos y España. Destacan especialmente las oportunidades en eólica marina, con 12.000 MW en derechos, a los que se añaden los 9.000 MW de opciones en Suecia.

Este desarrollo se está llevando a cabo al tiempo que se mejora la eficiencia, con una reducción del 3,3% en el gasto operativo neto hasta junio, y aumenta la generación de flujo de caja, que alcanza los 3.922 millones de euros en el semestre, un 1,1% más.

De acuerdo a su compromiso de mantener la solidez de su balance, Iberdrola cuenta con una liquidez de 14.600 millones de euros al cierre de junio, suficiente para cubrir las necesidades de financiación de 30 meses en un contexto normalizado.

En el conjunto del año, en un entorno aún incierto por los efectos de la pandemia, el grupo mantiene su previsión de crecimiento del beneficio neto entre el 5 y el 10% así como su política de remuneración al accionista en línea con la evolución del beneficio.

(SERVIMEDIA)