Un total de 493.500 ciudadanos no comunitarios que solicitaron entrar en España vieron denegada su petición durante 2019, lo que sitúa al país a la cabeza de la UE en rechazo de entrada de extranjeros.
Así lo revelan los datos publicados este miércoles por Eurostat, que además colocan a España como el cuarto que más ciudadanos extracomunitarios expulsó ese año (37.900).
A nivel comunitario, las solicitudes de entrada a la UE rechazadas aumentaron un 58% en 2019, hasta las 717.600.
España fue el país que más rechazó en frontera, seguida de Polonia (65.400) y Francia (56.600). Marroquíes, ucranianos y albanos fueron los ciudadanos a los que más se les denegó la entrada en 2019, con 489.900, 66.500 y 22.800 peticiones denegadas.
Por otro lado, los datos publicados hoy muestran que 627.900 personas resultaron identificadas como residentes en situación irregular en algún Estado de la UE durante 2019, un 10% más que en el ejercicio anterior pero un 70% menos que en 2015, cuando se alcanzó el pico de ilegalidad en este ámbito. Alemania fue el país que más personas en situación iregular reportó (133.500), seguida de Grecia (123.000), Francia (120.500) y España (62.900).
FRANCIA, EL QUE MÁS EXPULSA
el Estado de la UE que más órdenes de expulsión dictó contra ciudadanos no comunitarios en 2019 es Francia, con 123.800 órdenes ejecutadas. Figuran a continuación Grecia, con 78.900, y Alemania y España, con 47.500 y 37.900 expulsiones, respectivamente.
En total, a 491.200 ciudadanos se les obligó a dejar algún Estado miembro de la UE, un 8% más que el año anterior. Sin embargo, las deportaciones a Estados fuera del teritorio de la Unión se redujeron un 2,5%, hasta las 142.300 personas.
Esto significa que la mayoría de ciudadanos forzados a dejar un Estado miembro de la UE fueron retornados a otro país de la Unión Europea. Polonia y Alemania fueron los países que más extracomunitarios obligaron a salir fuera de la UE, con 25.900 y 25.100 en cada caso.
Tras ellos se encuentra Francia, con 15.600 expulsiones, seguida de España y Países Bajos, con 11.500 y 11.100. De nuevo, los nacionales de Ucrania, Marruecos y Albania fueron quienes más deportaciones sufrieron, tanto a países dentro como fuera de la UE.
(SERVIMEDIA)