Una llama ardiente en un pebetero en el centro de la plaza de la Armería del Palacio Real en representación de las víctimas de la Covid-19 ha sido el foco central sobre el que se ha desarrollado este jueves el homenaje y recuerdo a los fallecidos en la pandemia.
La ceremonia ha servido para despedir a los fallecidos y reconocer a los que lo han trabajado durante los momentos más difíciles de la crisis del coronavirus, desde sanitarios a otras profesiones que no cejaron en su labor.
El acto, donde ha primado la presencia de personas de la sociedad civil, ha contado con la Familia Real, el Gobierno en pleno, todos los presidentes autonómicos, el presidente de la FEMP y los expresidentes con la excepción de Felipe González, que ha alegado imposibilidad para desplazarse. También los líderes y portavoces parlamentarios de todos los partidos políticos, con la excepción de Vox, que se ha autoexcluido.
En el acto han estado representantes de todas las confesiones religiosas reconocidas en España y representantes internacionales, como el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel; la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen; el presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli; el Alto Representante de la Unión Europea, Josep Borrell; el director general de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom; y el secretario general de la Organización Mundial del Turismo (OMT), Zurab Pololikashvili.
CÍRCULOS CONCÉNTRICOS
Alrededor del pebetero, en círculos concéntricos y con la separación debida, se han sentado cerca de 500 personas. En un lugar preferente ha estado el Rey y la Familia Real, flanqueados por las dos personas que han tomado la palabra en nombre de los fallecidos y los trabajadores.
El hermano de José María Calleja, fallecido por Covid-19 en Madrid, ha leído unas palabras en nombre de las personas que han sufrido por la pandemia. Después, ha tomado la palabra una enfermera del hospital Vall D´hebron de Barcelona, como portavoz de todos los trabajadores esenciales que no pararon.
Cada autoridad y una víctima se han levantado en pareja para hacer una ofrenda floral al pebetero. Este gesto lo ha inaugurado el Rey.
El Rey ha dedicado unas palabras, única intervención de una autoridad del Estado en todo el acto, y después el actor José Sacristán ha leído el poema ‘Silencio’ de Octavio Paz, que ha dado paso a un minuto de silencio en recuerdo de las miles de personas que han fallecido por Covid-19 en España.
(SERVIMEDIA)