La Comunidad de Madrid pondrá en funcionamiento a partir de otoño el Instituto de Medicina Legal para combatir el Covid-19

El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid aprobará este miércoles una inversión de 4,3 millones de euros en las obras de finalización del Instituto de Medicina Legal (IML), que estará en marcha quiza en octubre, explicó el consejero de Justicia, Enrique López.

Dijo que, con esta decisión, el Ejecutivo regional «concluye la construcción de un edificio inacabado con el que, gracias a sus características, la Comunidad de Madrid quiere, a partir de otoño, combatir el COVID-19, los rebrotes futuros y enfermedades de similares características”.

El contrato, que prevé una duración de las obras de tres meses y medio, dará como resultado la entrada en funcionamiento de un edificio “pionero” que se convertirá en “una referencia en el estudio forense en nuestro país y que va a contribuir a salvar vidas”, según López.

Como explicó el consejero, la crisis sanitaria del Covid-19 ha puesto de manifiesto “la necesidad de que Madrid tenga un Instituto de Medicina Legal a pleno rendimiento”.

Para ello, añadió, “a corto plazo, y una vez finalizada las obras, procederemos a trasladar a estas instalaciones a los profesionales que han dado servicio estos años en el Instituto Anatómico Forense”.

“Serán ellos, los que combatan el Covid-19 con sus estudios, en sinergia con el futuro hospital que se va a levantar en Valdebebas, en la parcela contigua al IML”, sostuvo.

Además, dijo, “el IML supone dar vida por fin al primer hito del proyecto de unificación y concentración de sedes del Partido Judicial de Madrid”, con el que “queremos, de una vez por todas, y de la mano de todos los operadores que intervienen en la administración de Justicia, modernizar el servicio que se ofrece a los madrileños y profesionales que dan forma a la Justicia madrileña”.

Afirmó que el relanzamiento del proyecto se vio favorecido el pasado 3 de marzo, fecha en la que una sentencia del Tribunal Supremo avaló el desestimiento del Gobierno regional sobre el proyecto anterior de Ciudad de la Justicia y, por tanto, dio vía libre al Ejecutivo regional para “repensar, rediseñar y poner en marcha nuestro proyecto de concentración de sedes”.

Indicó que el IML va a tener un “papel protagonista” en el nuevo desarrollo de Valdebebas, como primer hito de esa futura Ciudad de la Justicia, pero también formando parte de un proyecto de expansión del área noreste de la capital, con un hospital de epidemias al lado, la ampliación de Ifema, la nueva terminal del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid Barajas y unas infraestructuras de transportes que, con un nuevo ramal en la Línea 8, mejorarán la movilidad y comunicación en este polo de atracción de la actividad jurídica, económica y residencial de la región.

CENTRO FORENSE DE REFERENCIA

El edificio, de planta circular, tiene un radio de 27 metros, y 13.500 metros cuadrados repartidos en ocho plantas –distribuidas en dos sótanos y cinco alturas-. La infraestructura dispone de cámaras de conservación para 125 cuerpos, más dos cámaras frigoríficas colectivas con capacidad para albergar 100 cuerpos más.

El IML estará equipado con 19 mesas de autopsias, con la posibilidad de habilitar otras 34 mesas adicionales. El edificio dispondrá, además de los señalados, de todos los servicios necesarios para el adecuado funcionamiento, incluyendo servicios generales, patología, antropología y odontología forense, laboratorios, toxicología y bioquímica forense, hemogenética forense, aulas magnas de formación e histopatología, entre otros.

Además, una vez finalizada su construcción, el IML contará con una sala específica de bioseguridad, que garantizará la seguridad de médicos forenses, técnicos auxiliares de autopsia, técnicos de laboratorio y fotógrafos que intervienen en autopsias a cuerpos cuya causa de fallecimiento esté vinculada a virus o pandemias.

Los profesionales que trabajan en el antiguo Instituto Anatómico Forense se trasladarán al edificio al finalizar las obras proyectadas, pasando a integrar el personal del Instituto de Medicina Legal de la Comunidad de Madrid.

DIRECCIÓN DE OBRA

Con la entrada en funcionamiento del IML, el Ejecutivo regional cumple además con el objetivo y compromiso de relanzar el proyecto de agrupación de sedes del Partido Judicial de Madrid. Este proyecto, con el que la Comunidad pretende modernizar la Justicia madrileña, tras la sentencia del Tribunal Supremo, conocida en marzo, se encuentra en fase de rediseño y estudio por parte de la Consejería de Justicia, Interior y Víctimas.

La tramitación de emergencia de este contrato de obras, responde a las alertas lanzadas por las autoridades sanitarias internacionales y nacionales sobre el riesgo de rebrotes del Covid-19 en los próximos meses.

En este escenario, dijo López, la realización de autopsias a fallecidos por coronavirus, es clave para encontrar posibles tratamientos. Siguiendo este planteamiento, el procedimiento de emergencia ha concluido con la adjudicación del contrato a Vías y Construcciones, de Dragados, habiéndosele ofertado a un total de diez constructoras: Isolux Corsán, Obrascón Huarte Laín, Sacyr, Acciona, Fomento de Construcciones y Contratas, Ferrovial, Ortiz Construcciones y Proyectos, Aldesa Construcciones, Construcciones San José y la que ha resultado adjudicataria.

En la misma sesión, el Consejo de Gobierno aprobará destinar 99.500 euros al contrato de servicios para la dirección de obra, dirección de ejecución y coordinación de seguridad y salud de la obra de terminación del IML. Este contrato ha sido adjudicado al arquitecto Andrés Lorente Martínez.

MATERIAL DE PROTECCIÓN

Por último, el consejo de Gobierno acordará un tercer contrato de suministro de material de protección de carácter especializado para uso del personal que integrará el Instituto de Medicina Legal una vez que concluya la obra. La cuantía del contrato asciende a 250.000 euros, y tiene como objetivo garantizar la protección de los servicios de patología forense, laboratorios de toxicología forense, clínica médico-forense y servicios de guardia del IML.

El trabajo de estos profesionales es esencial en la lucha contra la pandemia, ya que su cometido consistirá en la realización, entre otras, de autopsias clínicas con riesgo biológico de contagio.

En concreto, se ha procedido a la compra de 51.500 unidades de mascarillas higiénicas TNT de tres capas, 340 unidades de mascarillas FPP, 1.000 mascarillas de tipo FFP2 y 2.500 mascarillas de tipo FPP1.

Asimismo, se han adquirido 2.760 cajas de 100 guantes de nitrilo, 8.250 buzos de protección, 8.777 botas desechables de velcro, 2.025 batas impermeables, 500 gorros y 50 protectores faciales.

Se han comprado también 1.000 unidades de geles hidroalcohólicos y 25 alfombras quirúrgicas.

(SERVIMEDIA)