El ministro de Sanidad, Salvador Illa, aseguró este martes, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, que lo fundamental en estos momentos respecto en la lucha contra el Covid-19 es detectar de forma muy precoz los brotes y «actuar sin contemplaciones» para mantenerlos bajo control.
El titular de Sanidad informó de que existen 120 brotes desde que finalizó el estado de alarma. «Desde la desescalada se han notificado 171 brotes y, de ellos, 120 están activos con 2.139 casos asociados. La mayoría de ellos están en situación de control y algunos de ellos esperamos que lo estén en breve».
En relación al brote de la comarca del Segriá en Lleida, el ministro señaló que «sin perjuicio del análisis que llevan a cabo los correspondientes servicios jurídicos del Estado, no parece que el decreto aprobado por la Generalitat de Cataluña, no parece, que invada competencias. Aquí lo importante es actuar para cortar el brote».
En este sentido, añadió que en esta fase de control «les corresponde a las comunidades autónomas tomar las medidas necesarias para controlar cualquier brote pero ahí está el Gobierno de España para echar una mano en lo que se nos pida». De hecho, reconoció que la colaboración con la Generalitat «es muy fluida, como no puede ser de otra manera ante una situación de crisis sanitaria como la que tenemos en el Segriá».
«Hay que ser respetuosos con todas las decisiones judiciales pero insisto en que hay instrumentos para contener un brote y en esto estamos enfocados», subrayó.
PLAN DE RESPUESTA TEMPRANA
El titular de Sanidad trasladó ayer a las comunidades autónomas en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (Cisns) el borrador del ‘Plan respuesta temprana en un escenario de control de la pandemia por Covid-19’ y que hoy ha presentado al Consejo de Ministros. El plan articula el conjunto de medidas para hacer frente al Covid-19 en el escenario actual y en los que puedan producirse en un futuro. Ahora espera que las comunidades den el visto bueno al Plan el próximo jueves.
Las comunidades podrán ahora hacer sus aportaciones antes de su aprobación definitiva en el Cisns del próximo jueves. El objetivo general de este Plan es doble: reducir el impacto de la pandemia mediante el fortalecimiento de intervenciones rápidas, oportunas y eficaces y, al mismo tiempo, preparar las capacidades de España frente a un incremento de la transmisión que, llegado el caso, pueda derivar en una segunda ola de transmisión de SARS-CoV-2.
El Plan establece que las actuaciones de preparación y respuesta deben adoptarse de forma consensuada y coordinada por los distintos agentes implicados en la evaluación y gestión del riesgo.
Las comunidades autónomas tendrán que tener un ‘stock’ con suficiencia de reservas estratégicas para dos meses, aunque el Ministerio de Sanidad también hará acopio para tener en la reserva un 25% de este material por si alguna región pudiera necesitarlo o fallaran sus reservas. Se incluyen equipos de protección, respiradores, tratamientos y demás medicinas.
Asimismo, el plan contempla escenarios en los que se tenga que limitar la exposición de la población al virus y prevé una mayor coordinación de las regiones en el seno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, que podría imponer a las regiones algunas limitaciones para controlar el virus.
Además, este plan requiere una acción amplia y coordinada e incluye la preparación en los ámbitos de Salud Pública, asistencia sanitaria y laboratorio, la compra extraordinaria de la vacuna de la gripe y la preparación de las medidas farmacológicas y no farmacológicas frente al Covid-19.
NUEVOS CONFINAMIENTOS
Según el borrador del plan presentado a las comunidades autónomas, se distinguen tres escenarios con medidas para cada uno de ellos. El más leve son los “brotes controlados o casos esporádicos limitados”, para los que únicamente se realizan las labores habituales de rastreo y aislamiento de los afectados, además de la vigilancia epidemiológica ya habitual.
En casos de “brotes complejos o transmisión comunitaria esporádica”, Sanidad prevé reducción de aforos a la mitad e, incluso, el cierre de determinados establecimientos en los que pueda haber aglomeraciones como discotecas. También se limitarán visitas a residencias y se recomendará confinamiento a personas vulnerables.
El último de los escenarios es el de transmisión comunitaria descontrolada, para el que se prevé el “confinamiento en todo el territorio estatal o en territorios específicos” restringiendo la movilidad y movilizando, si hiciera falta, a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Según este plan, si alguna comunidad autónoma actuara “con pasividad”, el Plenario del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, que reúne a los propios gobiernos regionales, podría imponer medidas en las regiones que lo precisaran.
(SERVIMEDIA)