Los precios se redujeron en junio un 0,3% en comparación con el mismo mes de 2019 y seis décimas menos frente al retroceso interanual del 0,9% contabilizado en mayo, según confirmó este martes el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Se trata del tercer mes consecutivo con el IPC en tasa interanual negativa, si bien ha moderado su disminución interanual frente al 0,7% que acusó en abril y el 0,9% anotado durante el mes de mayo en pleno confinamiento por el Covid-19.
Según el INE, el aumento respecto a mayo se debe, en su mayoría, a las subidas de los precios en el transporte, que si bien se redujeron un 5,2% interanual, suben tres puntos frente a mayo, consecuencia de que los precios de los carburantes y lubricantes para el transporte personal aumentaron.
La vivienda incrementó su tasa más de dos puntos, hasta el –3,8%, debido a que los precios de la electricidad y el gasóleo para calefacción suben este mes, mientras que bajaron el año anterior
Por su parte, el grupo con mayor influencia negativa es el correspondiente a los alimentos y bebidas no alcohólicas, cuya tasa disminuyó siete décimas y se situó en el 2,8%.
Los precios de los productos del Grupo especial Bienes Covid-19 registraron a su vez una tasa anual del 2,3% en junio, cinco décimas menos que el mes anterior. La variación anual de los Servicios Covid-19 aumentó más de un punto y medio, hasta el caer un 2,4%.
Entre estos bienes y servicios destacó el comportamiento de los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas, cuya tasa anual pasó del 3,5% en mayo al 2,8% en junio, y de la energía eléctrica, que registró una variación anual del –10,8%, más de seis puntos por encima de la del mes anterior.
Los Bienes Covid-19 incluyen productos de alimentación, bebidas, tabaco, limpieza y artículos no duraderos para el hogar, productos farmacéuticos, comida para animales y artículos para el cuidado personal.
Por su parte, los Servicios Covid-19 contienen servicios de alquiler de vivienda y garaje, la distribución de agua, alcantarillado, recogida de basuras, gastos comunitarios, electricidad, gas, gasóleo para calefacción, servicios de telefonía, música y televisión en streaming, seguros, comisiones bancarias y servicios funerarios.
Los productos que destacan por su influencia en los Bienes Covid-19 son los alimentos no elaborados, cuya tasa alcanza el 4,1%, casi un punto y medio menos que la registrada en mayo. Entre ellos sobresalen el comportamiento de los precios de las frutas frescas, que aumentan menos que el año pasado, y la disminución de la carne de porcino, la carne de ave y las legumbres y hortalizas frescas.
Con la restricción del estado de alarma el INE ha realizado la recogida de precios de manera telemática, incluso en junio, ya que se levantó el 22 de junio, permitiendo que la mayoría de establecimientos comerciales reanude su actividad.
En junio, la mayoría de la cesta de productos del IPC ya está disponible para su adquisición por los hogares, a excepción de los artículos relacionados con el turismo y la asistencia a espectáculos deportivos y culturales. Por tanto, en el IPC de junio los procedimientos extraordinarios utilizados para la estimación de precios han dejado de utilizarse, volviendo a los métodos habituales, a excepción de en dichos artículos, donde se ha realizado una estimación adecuada para adaptarse a las necesidades de esta situación.
(SERVIMEDIA)