La capitana de la selección española de baloncesto en silla de ruedas es la Portavoz de la comisión de Educación y Cultura y de la Discapacidad de la región de Murcia. «Desde la política se puede trabajar mucho por y para el deporte y la discapacidad».
Es una veterana del deporte paralímpico: capitana de la selección española de baloncesto en silla de ruedas y en Tokio verá cumplido su sueño de estar en unos Juegos. Es Sonia Ruiz, una de las personas que mejor puede contar la evolución tan positiva que ha experimentado el deporte paralímpico femenino en los últimos tiempos.
«Ha sido un trabajo largo y muy duro, pero al final hemos colocado a la selección española donde creo que se merece». Y se atreve a realizar una predicción: «Yo apostaría por una medalla de bronce en Tokio».
Murciana (lleva su tierra muy adentro), su vinculación con el deporte y la discapacidad la lleva incluso al trabajo. Sonia es ahora mismo Portavoz de la comisión de Educación y Cultura y de la Discapacidad de la región de Murcia, algo que jamás hubiera pensado.
«Cuando me metí en esto de la política me pareció un solemne disparate, porque yo nunca había estado vinculada a la política y no sabía si estaba preparada para algo así. Pero es verdad que desde aquí he podido trabajar mucho por y para el deporte y la discapacidad».
Sobre España, la capitana destaca el buen ambiente que hay en el combinado nacional que dirige Abraham Carrión. Aunque admite que ha tenido que «aguantar mucho vacile por ser la veterana», reconoce que el buen rollo «es una de las señas de identidad de este equipo».
Bromas del tipo «eres la mejor sacadora de banda del mundo» o «tirarme a una piscina, con silla de ruedas incluida» son algunas de las anécdotas más curiosas que cuenta en las redes sociales del del Comité Paralímpico Español.
En su opinión, la mezcla entre veteranía y juventud es lo que ha llevado a España, por primera vez en su historia, a estar en unos Juegos por mérito propio (la anterior fue en Barcelona’92 como anfitriona).
Su visión de la discapacidad
Por otro lado, sobre sus grandes referentes en este mundillo, Sonia explica que «siempre me ha gustado Laia Palau, Rafa Nadal y Carolina Marín. Creo que son grandísimos deportistas, y que, además, representan perfectamente unos valores que a mí me han hecho madurar y mejorar como persona. Creo que el deporte me ha hecho ser como soy y pienso que la discapacidad me ha dado más de lo que me ha quitado».
Tokio y el año 2021 son el gran objetivo para todos los deportistas, tanto paralímpicos como olímpicos. Allí, en la capital japonesa, estará Sonia, cumpliendo un sueño. Lo de la medalla de bronce o no lo dictará la pista.