Expertos policiales y farmacéuticos intercambiarán información y formación para mejorar la protección de personas mayores, víctimas de violencia de género y menores en situación de riesgo, así como para prevenir la desaparición no voluntaria de personas.
Policía Nacional y Guardia Civil intercambiarán formación e información con la red de 22.102 farmacias repartidas por toda España para reforzar las labores policiales de protección y auxilio a aquellos colectivos sociales más vulnerables, como las personas mayores, las víctimas de violencia de género o los menores de edad en situaciones de riesgo como los malos tratos o el alcoholismo.
El secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez, y el presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF), Jesús Aguilar, han firmado un acuerdo en virtud del cual Policía Nacional y Guardia Civil podrán disponer de la colaboración de la red de farmacias comunitarias para difundir mensajes y material divulgativo con consejos de autoprotección y prevención orientados a estos grupos vulnerables, aprovechando la accesibilidad, cercanía y confianza de los ciudadanos en las farmacias comunitarias.
Tanto Policía Nacional como Guardia Civil designarán un interlocutor que permita canalizar el intercambio de información con los profesionales del sector y coordinar la realización de actividades formativas recíprocas sobre aquellos riesgos que amenazan la seguridad de los grupos de población más vulnerables.)
«Es precisamente esa vulnerabilidad la que convierte a los miembros de esos grupos sociales en usuarios habituales de las farmacias, cuyos profesionales suelen ser los primeros en detectar síntomas de riesgo en el caso de personas mayores, víctimas de violencia de género, menores víctimas de malos tratos o con problemas de alcoholismo, así como la desaparición de personas que, sin motivo aparente, dejan de acudir al establecimiento», han explicado.
Detectar señales de alarma
Gracias al convenio, los expertos de Policía Nacional y Guardia Civil asesorarán a los profesionales para una mejor detección de esas señales de alarma y se generarán cauces ágiles para que esa información llegue cuanto antes a las unidades policiales adecuadas, de manera que sea posible habilitar cuanto antes medios de prevención o de auxilio.