Los presidentes de las comunidades autónomas gestionarán la fase 3 del plan de desescalada en su territorio hasta el punto de que ellos decidirán el tiempo en el que estarán en esta última fase antes de llegar a la llamada ‘nueva normalidad’.
Así lo trasladó el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la rueda de prensa que ofreció este domingo desde el Palacio de la Moncloa, al término de la duodécima Conferencia de Presidentes.
Sánchez explicó que cada presidente autonómico decidirá si deben estar dos semanas o diez días en la fase 3 y que, al tiempo que decidan, como autoridad competente, “el Gobierno no podrá objeción”.
Dentro de esta gobernanza en manos de las CCAA, Sánchez explicó que serán los presidentes regionales quienes “dirán si consideran que hay que levantar el estado de alarma” en su comunidad, porque son ellas las que tienen en esa fase la competencia de sanidad.
En el caso de rebrotes, como ya se han dado en algunos puntos como “fruto de la irresponsabilidad de algunas personas”, Sánchez comentó que será cada gobierno regional el que decida qué hacer pero que, si lo piden, desde Sanidad y el Gobierno se les aportará la “opinión” de los expertos.
A este respecto, Sánchez recordó que así fue “como empezó todo” con pequeños focos, por lo que apeló en varios momentos de la rueda de prensa a la responsabilidad individual para prevenir los contagios porque “el virus sigue ahí”.
Pese al control en manos de las CCAA, el presidente afirmó que el Gobierno se reserva el control de la movilidad, pero sin aclarar con qué medida una vez que haya finalizado el estado de alarma el 21 de junio y en el caso de que algunas regiones aun sigan dentro del proceso de desescalada.
«La capacidad de decisión en esta última fase 3 corresponde a cada Comunidad Autónoma. Es decir, en manos del Gobierno lo único que quedará será la regulación de la movilidad», afirmó Sánchez. “El Gobierno solamente se va a encargar de restringir la movilidad”, añadió.
Es más, Sánchez afirmó que “a partir del 8 de junio y hasta el 21 de junio habrá comunidades autónomas enteras que estén ya en la ‘nueva normalidad’ y, por tanto, se pueda levantar ya el estado de alarma”.
A partir de ahí, Madrid y Barcelona –porque van más lentas en la desescalada por el gran número de casos que han tenido- podrán estar en fase 3 y, “dada la evolución de la epidemia no será necesario prolongar aún más el estado de alarma”.
“Es el 21 de junio, en principio, cuando por toda España podamos circular”, trasladó el presidente remarcando las cautelas de si se sigue con la situación epidemiológica actual.
(SERVIMEDIA)