Detrás de Experimental Gamer Studios está el desarrollador Dave Welch, un amante de las aventuras clásicas de 16 bits que con este Boot Hill Bounties publica el segundo juego de una trilogía ambientada en el lejano oeste americano pero con un estilo de juego RPG por turnos, lo que se conoce como un JRPG.
Tras pasar por PC con una financiación crowdfunding, llega este Boot Hill Bounties, que comienza una década después de lo sucedido en Boot Hill Heroes, el juego anterior. Nuestro protagonista es Kid, que con Moon, la hija de un jefe indio, Rosy, una domadora de circo y Doc, un viejo vaquero que aporta la experiencia, van a buscar a la banda de los Saints-Little en busca de venganza. Si no os recuerda a una película Western, es que es hora de que os pongáis a ver este buen género de cine.
Así pues, como si de Mega-Man se tratara, deberemos decidir a cuál de los miembros de la banda ir a ajustar cuentas, dándonos así una buena dosis de libertad a la hora de ir por el camino que queramos. Tendremos 5 capítulos por completar con distintos hilos argumentales y con distinta complejidad. Como decimos, Boot Hill Bounties es la segunda parte de la trilogía pero no es necesario jugar a la primera entrega para enterarnos de lo que sucedió y está sucediendo. El juego lucha por que no haga falta jugar, aunque bien es cierto que se hacen ciertas referencias a lo que ocurrió una década atrás y si no hemos jugado, no nos enteraremos, aunque no son para nada indispensables.
Con unos personajes carismáticos al más puro estilo de cualquier juego y película del Oeste, vamos a recorrer un escenario plagado de secretos, curiosidades y detalles que homenajean al género. Podremos hablar con muchos personajes y tener opción de elegir diálogo, tendremos que resolver situaciones y puzzles, leer periódicos y todo en una historia bien hilada y que nos enganchará.
En cuanto a la jugabilidad. Cada personaje cuenta con un gorro o sombrero que hace las veces de un sistema de trabajo y que nos da acceso a ciertas habilidades. Al más puro estilo Pokémon, solo podremos usar 4 habilidades a la vez, así que a medida que vayamos mejorando, deberemos quedarnos con las más útiles y desechar las que no queramos. Podremos cambiar de gorros y esto hará que haya algunos más interesantes que otros, y podremos encontrarlos tanto en tiendas como lootearlos. Aparte cada personaje tiene una habilidad especial que nos ayudará fuera del combate.
En cuanto al combate, es un JRPG clásico pero con toques modernos. Las habilidades cuestan ciertos puntos y los vamos consiguiendo a medida que una barra de poder va aumentando. Cuando tengamos los puntos necesarios podremos atacar, esto lo haremos con cada uno de los personajes, podremos atacar en tiempo real y también preparar el siguiente ataque para cuando vuelva a conseguir el coste necesario. Los enemigos de igual manera atacarán a medida que su barra de poder va aumentando. Este sistema nos ha recordado a Clash Royale y la verdad es que está muy bien implementado.
Tras cada combate nuestros personajes recuperan salud, poder y ganan experiencia, pero nos ha llamado la atención mucho que si un aliado cae en batalla, se repondrá automáticamente tras unos segundos dependiendo de las veces que lo hayan noqueado. También el juego cuenta con estados alterados que se mantendrán y que curaremos en los doctores. Aparte tendremos muchos tipos de enemigos, desde castores, conejos hasta los más temidos forajidos.
EL juego nos va a ofrecer multitud de variables que va a hacer que siempre veamos algo nuevo y que, como pasa en otros JRPG, no siempre hagamos lo mismo, no tengamos esa sensación de volver a jugar de nuevo a lo anterior. Con todo ello y dependiendo de nuestra habilidad y de lo que exploremos, este Boot Hill Bounties se puede ir fácilmente por encima de las 20 horas, una duración que puede ser mayor si queremos ser complexionistas y que habla muy bien del buen hacer del desarrollador.
Gráficamente destaca su toque retro de 16 bits, aunque en la parte artística no destaca. Paisajes bastante simples y texturas que a veces no entran demasiado por los ojos. La perspectiva isométrica nos ha dado algún problema de ubicación pero aún así, es un juego indie y no podemos pedirle lo que a otras producciones multimillonarias. Cumple sin más al igual que el sonido.
A pesar de que el juego está en inglés, Boot Hill Bounties es una buena experiencia de juego para los amantes del Western y del JRPG porque tiene mecánicas que son poco habituales y que nos engancharán y harán que queramos seguir adelante. La historia, el guión, sin ser una obra de arte, engancha, tiene sus giros y nos hace meternos en la aventura. La jugabilidad tiene su intríngulis y su táctica y acompaña a un buen juego que llega de la mano de Experimental Gamer Studio y que ahora lo podremos jugar en cualquier lugar gracias a nuestra híbrida Nintendo Switch.