Además de los 9.450 test de detección del coronavirus defectuosos que compró el Gobierno y que se repartieron por la Comunidad de Madrid, había otros 50.000 que se han devuelto antes de ser repartidos.
La información ha sido adelantada por la ‘Cadena SER’, quien recuerda que el Gobierno no ha desvelado el nombre de la proveedora española que compró esos test a Bioeasy, una compañía que, según la embajada china en España, no tiene licencia para vender esos productos.
Pedro Sánchez, el pasado 21 de marzo, presumía de la compra de estos test asegurando que eran «fiables y homologados».
“Algo muy importante: los tests rápidos. Se tratan (sic) de test fiables, homologados. Y esto es muy importante: la homologación. Es muy importante porque deben contar con todas las garantías sanitarias”.
Pedro Sánchez. pic.twitter.com/DFnVwjNkQf
— Jorge Bustos (@JorgeBustos1) March 26, 2020
La Comunidad de Madrid ha denunciado que recibió por parte del Ministerio de Sanidad cerca de 9.450 test de diagnóstico rápido que no funcionaban tanto en cribado de población como en muestras de laboratorio, donde se comprobó que sus resultados eran «sospechosos.