Crece la alarma entre la población tras las últimas medidas anunciadas por las autoridades para intentar contener el coronavirus.
La preocupación se ha agravado especialmente en Madrid después de que este lunes la Comunidad anunciara que desde el miércoles se suspendían las clases en todos los niveles educativos.
Al mismo tiempo el Minsisterio de Sanidad pedía evitar desplazamientos innecesarios y confirmaba que la situación ha empeorado.
Un escenario que lleva a pesar que algunos de los eventos que se permitieron durante el fin de semana en Madrid no se debieron haber autorizado.
Uno de los más multitudinarios fue la manifestación del 8-M que congregó en el centro de Madrid a miles de personas. Un acto que impulsó el Gobierno a bombo y platillo y en el que también participaron representantes políticos de la oposición. La ministra de Educación fue vista con guantes.
Crisis #coronavirus. Polémica por los guantes de látex que utilizaron la ministra Celaá y Valerio el 8-m. El gobierno no suspendió la manifestación pero 24 horas después ha reconocido que la situación ha empeorado. pic.twitter.com/zNfJw1Wk3h
— María Eizaguirre Comendador (@MariaEizaguirre) March 10, 2020
Vox también está en el punto de mira después de que este fin de semana el partido de Santiago Abascal protagonizara un acto multitudinario en Vistalegre. Aunque desde la dirección se pidió a los simpatizantes que se encontraran enfermos que no acudieran, lo cierto es que tampoco parece muy conveniente.
A todo esto debemos de sumar las competiciones deportivas que tuvieron lugar durante el fin de semana y donde se congregaron miles de personas. Ahora se estudia que los partidos tengan lugar a puerta cerrada.