Los logopedas presentan un decálogo para mejorar la calidad de vida de las personas con esta patología, que tiene graves consecuencias en la capacidad de nutrición e hidratación, el estado general de salud y la calidad de vida de las personas que la padecen.
Los logopedas han puesto el foco de atención en este trastorno de la deglución de los alimentos sólidos y líquidos, que afecta al 8 % de la población española.
Se trata de una patología que tiene graves consecuencias en la capacidad de nutrición e hidratación, el estado general de salud y la calidad de vida de las personas que la padecen, según el Colegio Profesional de Logopedas de la Comunidad de Madrid (CPLCM).
En ese contexto, estos especialistas consideran necesario situar a las personas con disfagia en el centro de la intervención y ofrecerles una atención integral y de calidad. Por ello, el Colegio Profesional de Logopedas de Galicia ha elaborado un decálogo, al que se han suscrito los demás colegios profesionales, que “invita a reflexionar acerca de las medidas imprescindibles para conseguir este objetivo. Asimismo animan a las Administraciones Públicas, a los profesionales y a las propias personas con disfagia y sus familiares a trabajar para la consecución de los objetivos marcados en este decálogo”.
Decálogo de la disfagia #vivircondisfagia
- Participación. Las personas con disfagia y su entorno directo han de participar activamente en la toma de decisiones sobre su alimentación.
- Información. Se debe proporcionar a la persona con disfagia información suficiente sobre las distintas opciones que existen para mejorar su alimentación.
- Acceso. La persona con disfagia debe tener fácil acceso a productos específicos necesarios para adaptar sus alimentos.
- Adaptación de fármacos. La persona con disfagia tiene derecho a poder adaptar sus fármacos para una ingesta más segura, por lo que urge informar a los profesionales sanitarios sobre este aspecto.
- Diagnóstico. La persona con disfagia debe recibir una evaluación adecuada de su deglución incluyendo el uso de técnicas instrumentales.
- Globalidad en la intervención. La intervención en la persona con disfagia debe contemplar tanto medidas compensatorias como rehabilitadoras e implicar a todos los profesionales necesarios (nutricionistas, facultativos, logopedas…).
- Seguimiento. La persona con disfagia debe contar con un seguimiento periódico especializado que permita controlar y revisar las medidas y tratamientos implementados.
- Universalidad. La persona con disfagia debe contar con apoyo especializado independientemente del momento del ciclo vital (neonatos, infancia, vida adulta, vejez) y del lugar en el que se encuentre (domicilio familiar, comedor escolar, residencias geriátricas, hospitales, centros de día…).
- Investigación. Se debe estimular que todos los profesionales implicados en el abordaje de la disfagia asuman un lenguaje común y puedan desarrollar investigaciones en este ámbito.
- Difusión. Es importante que la sociedad tenga mayor conocimiento de la disfagia y favorecer una mayor participación social de las personas con disfagia.
Presentación de un manual imprescindible sobre disfagia
En este marco, ayer se presentó el libro “Disfagia. De la evidencia científica a la práctica clínica”, de la editorial GiuntiEOS, un manual de consulta en el que distintos especialistas sanitarios (logopedas, enfermeras, médicos rehabilitadores, etc.) recogen las principales evidencias científicas en lo que respecta a la intervención en los pacientes con disfagia.
“Se trata de una obra indispensable para aquellos logopedas que quieran estar al día en el abordaje de la disfagia”, explica la logopeda y vocal de la Comisión de Sanidad del CPLCM, Margarita Durán.