El Hospital 12 de Octubre, Cardioalianza y Novartis lanzan el programa educativo iCerca para pacientes con insuficiencia cardiaca, una enfermedad crónica, debilitante y potencialmente mortal que supone la primera causa de hospitalización en mayores de 65 años.
El Hospital Universitario 12 de Octubre, la asociación de pacientes Cardioalianza y Novartis han puesto en marcha el programa de educación sanitaria para pacientes con insuficiencia cardiaca (IC) iCerca.
Se trata de una aplicación móvil interactiva que fomenta la formación del paciente y de sus familiares en el manejo de la enfermedad, tanto en el ingreso hospitalario, como después de recibir el alta y regresar a su domicilio, como apoyo y complemento a la labor educativa que desempeñan los profesionales sanitarios en el entorno hospitalario..
Así, a través de una aplicación instalada en tablets que se pone a disposición de los pacientes hospitalizados, y bajo la orientación del personal de Enfermería, se ofrecen las claves para comprender el funcionamiento de la enfermedad, detectar los síntomas de descompensación, conocer los diferentes tratamientos y mantener hábitos de vida saludables.
Para ello, el programa emplea materiales y recursos prácticos, como vídeos e infografías, además de acciones de activación del paciente. Asimismo, ofrece la posibilidad de entrar en contacto con otros pacientes y asociaciones de pacientes, explican desde las entidades promotoras de esta iniciativa.
“Gracias a la información que facilita la aplicación, se puede poner en práctica todo lo aprendido y fijarse diferentes retos que ayudarán a conseguir cambios reales, necesarios para una mejor identificación de signos de alerta y un mejor control de la IC. Para facilitar su uso, la aplicación también puede descargarse en el dispositivo de los pacientes, para continuar el proceso educativo una vez reciben el alta, contando con el apoyo de Cardioalianza que acompañará al paciente durante el programa educativo”, añaden.
Mejorar la calidad de vida
Maite San Saturnino, presidenta de Cardioalianza, apunta que “la puesta en marcha de proyectos como iCerca contribuye a mejorar la calidad de vida, tanto de los pacientes como de los familiares, ya que proporciona una herramienta útil y sencilla que les permitirá permanecer continuamente formados y controlar los factores de riesgo de una enfermedad que va a convivir con ellos durante el resto de sus vidas”.
El doctor Javier de Juan Bagudá, cardiólogo y responsable del Programa Transversal de Insuficiencia Cardiaca del Hospital Universitario 12 de Octubre y miembro del CIBERCV, explica que “la IC supone un verdadero reto sociosanitario, ya que es la primera causa de hospitalización en mayores de 65 años. En el área de referencia de nuestro Hospital se estima que tenemos hasta unos 20.000 pacientes con esta patología y unas 3.500 hospitalizaciones anuales”.
En ese marco, “consideramos que la hospitalización es un momento idóneo para conocer este programa, ya que el paciente y los familiares están más sensibilizados y tienen más tiempo para aprender sobre la enfermedad”, agrega el doctor de Juan.
La educación sociosanitaria y la fidelización del paciente con su tratamiento y hábitos de vida saludables suponen factores fundamentales para un correcto abordaje de la IC, “lo que contribuye a una mejor evolución y pronóstico de la enfermedad”, indica este especialista. Asimismo, señala que ambas contribuyen a “evitar hospitalizaciones, ya que les ayudan a ser capaces de reconocer ciertos síntomas y a manejar las etapas iniciales de la descompensación”.
El prisma de las enfermeras
Noelia de la Torre, enfermera del Programa Transversal de Insuficiencia Cardiaca CIVERCV del Hospital Universitario 12 de Octubre, añade que “iCerca supone un apoyo para la Enfermería en la planificación del alta, educando al paciente en los autocuidados y controles domiciliarios necesarios para el buen seguimiento de su patología”.
Por su parte, la responsable de Relaciones con Pacientes de Novartis, Josefina Lloret, afirma que, “en Novartis tenemos el compromiso de transformar la vida de los pacientes con enfermedades crónicas, como la IC, más allá del desarrollo de los tratamientos más innovadores. Por ello, colaboramos activamente con profesionales sanitarios y asociaciones de pacientes y nos apoyamos en las posibilidades que nos ofrecen las nuevas tecnologías para impulsar iniciativas dirigidas a mejorar la formación y la prevención, y mitigar así su impacto sociosanitario”.