Si la novela del ruso Dmitry Glukhovsky es para leérsela sin pestañear, el videojuego que lanzó allá por el año 2010 A4 Games estaba muy a la altura del texto. Poco después de Metro 2033 se publicaba Metro: Last Light, una continuación que no aparecía en los libros pero que nos daba más profundidad en la historia de Artyom tras los sucesos de 2033. En novelas este Metro: Last Light influyó en el posterior Metro 2035, quedando Metro 2034 como una historia accesoria. Fueron los dos juegos de Metro muy exitosos y Koch Media se vio obligada a lanzar un pack con ambos. Tras este pack y su pertinente remasterización, hoy tenemos un nuevo milagro en la Híbrida de Nintendo, pues Metro Redux, acaba de ser publicado en Switch para que todos podamos disfrutar de los dos juegos tanto en casa como en el lugar que más rabia nos dé.
La historia de Metro 2033 y Metro Redux está ambientada en un Moscú postapocalíptico en donde la radiación ha hecho sus estragos en la superficie y es imposible salir. Los supervivientes se han refugiado en la extensa red del Metro de la ciudad moscovita y cada estación es una pequeña ciudad que lucha por subsistir. Además se han formado distintos bandos y se han creado rivalidades entre distintas estaciones que hacen más complicada la convivencia. Por si esto fuera poco, en la superficie habitan unas criaturas producto de la radiación nuclear llamadas Los Oscuros (Los negros en la versión original del libro) que hacen sus incursiones de vez en cuando por la red ferroviaria.
En la primera entrega Artyom, el protagonista debe ir en busca de un amigo por los peligrosos túneles y se topará con los Oscuros y con distintos peligros más allá de las criaturas exteriores. La segunda parte, Metro: Last Light prosigue la historia de Artyom justo un año después de los hechos acaecidos en Metro 2033, no queremos contar más debido a que podemos caer en spoilers y realmente las dos historias merecen la pena de ser tanto jugadas como leídas.
La jugabilidad de Metro no ha sido retocada en absoluto. Metro es un juego shooter en primera persona con partes en las que el sigilo será esencial si queremos salir vivos de las situaciones que nos iremos encontrando. Vamos a tener que viajar a lo largo de la red de metro encontrándonos enemigos de todo tipo, tanto criaturas radiactivas como los propios humanos que no nos verán con buenos ojos. Un shooter de esos llamados pasilleros en los que la libertad de acción no es muy amplia y en la que deberemos ir siempre hacia adelante. Eso sí, vamos a tener diversión en todo momento y además, que a día de hoy ya pocos juegos son pasilleros, en este incluso lo vamos a agradecer.
La supervivencia es básica en Metro 2033 y vamos a tener el aliento de la muerte en nuestra nuca todo el rato. La munición es escasa, así que habrá que disparar gastando las balas justas, el derroche aquí está sobrevalorado. En cualquier momento podemos morir, ya sea por el ataque de una bestia, por uno de los guardias o simplemente despeñándonos en una de las zonas de tuberías Habrá que tener el máximo cuidado y la máxima precaución porque realmente Metro 2033 y Metro: Last Light no son juegos facilitos, suponen un reto.
La calidad de la imagen en ambos juegos es estupenda y aunque se pierde cierta calidad de nitidez a la hora de jugar comparando con la versión de las otras consolas, el juego luce de maravilla. Se mueve estupendamente sin caídas de frames y con unos modelados que lucen espectaculares ya sea a nivel de modo sobremesa o en el modo portátil. Entre los recortes que ha sufrido el juego para que se produzca el milagro de funcionar en Switch a ese nivel es la tasa de frames que no sobrepasa las 30 imágenes por segundo. Jugar a la versión de Xbox y a esta de seguido hará que tu ojo vea el cambio, pero si lo juegas y te olvidas de las demás versiones, no vas a notar nada, al contrario, lo vas a disfrutar.
Quizás uno de los puntos negativos es la baja luminosidad del juego, que entendemos que Metro es una saga oscura y la luz bajo tierra es un bien escaso, pero realmente hace complicado en modo portátil en un sitio iluminado y con la Nintendo Switch a tope de brillo el poder disfrutar de todos los detalles porque vamos a ver más bien poquito. No solo le pasa esto a la saga Metro, si no que a otros muchos juegos con baja luminosidad, son complicados de jugar en el exterior.
También se sacrifica un poco la potencia de carga al traspasar el juego a Switch y por lo tanto algunas pantallas de carga se nos van a hacer algo más largas de lo esperado. Hay que cargar muchas texturas, mucho mapeado y realmente el juego ahí si nos hace esperar. Por el contrario a nivel sonoro no tenemos ninguna queja y se mantienen la calidad original de las dos obras de A4Games.
En conclusión, si os gusta la supervivencia, algunos sustos, un mundo postapocalíptico tras una explosión nuclear que ha hecho florecer una sociedad establecida en el suburbano de Moscú, una sociedad con más similitudes a la nuestra de la que podríamos esperar a priori. Metro Redux contiene diversión, emoción, tiroteos, sigilo en una edición de lujo tanto para el que ya lo haya jugado y quiera volver a retomar la aventura en cualquier sitio con la Nintendo Switch como para el que no tuvo la oportunidad en su momento y pueda pasárselo en grande. Ahora Koch Media nos da una ocasión de lujo para tener en nuestras manos un imprescindible de Switch, este Metro Redux de A4 Games.