El presidente del CIEE, pregonero de las fiestas de San Gregorio el Chico participó en los diferentes actos programados
El presidente del Club Internacional de Empresarios & Emprendedores, Marco Antonio Cabrera Gil ofreció un pregón lleno de momentos muy emotivos y recuerdos de la infancia en las fiestas de San Gregorio el Chico en Telde, donde estuvo arropado por sus familiares, amigos, vecinos y los concejales del grupo de gobierno de Telde (Lidia Mejías, Álvaro Monzón, Eloy Santana, Servando González y Juan Martel).
Lidia Mejías, presidenta del colectivo vecinal de Los Llanos dio paso a la lectura del pregón de Marco Antonio Cabrera que interactuó continuamente con los vecinos asistentes y fue recordando a los familiares, vecinos y negocios de su época de la niñez. Hizo mención al camión de Andrés, al grupo Los Diamantes y su Bandurria; la moto de Pepe Monaga, el muro del estanque, las excursiones a la playa de Melenara, el televisor en blanco y negro, las bombonas de cerpa, la dulcería de Pimpina, el Molino de Isaac o el taller del maestro Diego, entre otros.
En este pregón se definió como un “LOCO SOÑADOR, quizás NO TAN LOCO, O REMATADAMENTE LOCO, pero sin duda alguna un GRANDÍSIMO SOÑADOR. UN SOÑADOR que, presume de su MAGNÍFICA EDUCACIÓN, de su FORMACIÓN Y EXPERIENCIAS VIVIDAS, y que lo único que busca es aportar su granito de arena, para intentar dejar un mundo mejor”.
Asimismo, destacó que ha viajado y vivido bastante tiempo fuera de España, conociendo países y otras culturas; reconoció tener muchísimos y valiosos amigos por todos lados. Pero asimismo, añadió “he visto caer naciones poderosas, ver familias destruidas por ideales, ver el egoísmo extremo, el egocentrismo desmedido, la traición de amistades, así como la miseria y la opulencia extrema. En definitiva, la estupidez desmedida del ser humano. He sobrevivido a cuatro crisis, incluyendo las de España (de las que he perdido por el camino a amigos por no soportar la presión), golpes de estado, cierre de bancos, paros petroleros, cierre de supermercados, militares y policías corruptos a niveles extremos. Por ese motivo, recordemos siempre lo bueno, y recordemos las anécdotas divertidas que nuestros seres queridos nos dejaron. Si queremos sobrevivir y ser feliz, esa es la dirección”.
Hoy domingo, Marco Antonio Cabrera Gil también participó en la misa que ofició el Padre Báez y que estuvo llena de anécdotas interesantes, donde no faltó el acompañamiento musical del grupo folclórico del colectivo Los Llanos para terminar degustando una excelente paella.
En este cierre de fiestas, destacó la importancia de la espiritualidad del ser humano y los valores como el respeto a nuestros semejantes para crecer como personas y construir un mundo mucho mejor.