Una de las principales cuestiones a la hora de ahorrar en la factura de la luz y cuidar del planeta es la optimización del consumo de energía. Utilizar los equipos eléctricos adecuados, aprender a sacarles el máximo rendimiento y adaptar la vivienda no solo nos permitirá consumir menos electricidad, sino que también nos permitirá aportar nuestro granito de arena al reto del cambio climático. Estas son algunas de las claves que pueden ayudar a los hogares a lograr este objetivo.
2Revisar el contrato
El término de potencia representa una parte importante del fijo que paga cada hogar por el suministro de electricidad. Según la OCU, cada 1,15 kW de potencia contratada suponen unos 50 euros más de factura al año.
Para ahorrar en la factura de la luz, lo primero que hay que hacer es revisarla. Comprobar cuál es la potencia contratada y plantearse si existe un margen para rebajarla. Si el limitador no salta aunque se pongan a la vez varios electrodomésticos como el lavavajillas, la lavadora y el horno, puede que la potencia contratada sea excesiva.
Además del término de potencia, otra manera de conseguir ahorros en la factura de la luz consiste en elegir la tarifa adecuada. Tal y como recuerda la OCU, la tarifa de discriminación horaria ayuda a muchos hogares a reducir lo que pagan por la electricidad. Suele ser adecuada para aquellas viviendas que concentran el consumo de luz entre las 10 de la noche y las 12 del mediodía en invierno, o entre las 11 de la noche y la una de la tarde en verano.