El vicepresidente destaca el incremento en sanidad, educación, empleo, vivienda, lucha contra la exclusión o derechos sociales, así como la atención al turismo, la industria, la I+D+i o la agricultura, en un marco de desarrollo sostenible
El vicepresidente y consejero de Hacienda, Presupuestos y Asuntos Europeos del Gobierno de Canarias ha señalado esta mañana que los Presupuestos Generales 2020 de la comunidad autónoma, que mañana presenta al Ejecutivo, son “unos presupuestos con perfil social, para atender a los más necesitados, pero sin olvidar a los sectores económicos, sin olvidar el turismo, la industria, la I+D+i o la agricultura, y siempre orientado hacia una economía más sostenible”. El vicepresidente ha hecho estas declaraciones al finalizar su comparecencia ante el Pleno del Consejo Económico y Social de Canarias (CES) dentro de la ronda con diversas organizaciones para explicar las claves de las nuevas cuentas autonómicas.
Rodríguez quiso resaltar las dificultades a las que se ha enfrentado el Ejecutivo a la hora de elaborar el presupuesto, advirtiendo de que “el Gobierno de Canarias ha decidido tramitar los Presupuestos garantizando una inversión de más de 1.000 millones de euros, a pesar del enfriamiento de la economía internacional, estatal y canaria, a pesar de la interinidad de la política española -no conocemos el plan de estabilidad, las cantidades a cuenta en materia de financiación autonómica- y a pesar de la herencia recibida, arrastrando gastos y consecuencias del presupuesto anterior, entre ellos 120 millones de euros en el Capítulo 1, en virtud de las rebajas horarias al personal docente y sanitario que se hicieron en campaña electoral por el Gobierno anterior, y que mantendremos”.
“En ese contexto”, señaló el vicepresidente, “hacemos unos Presupuestos que van a crecer un 2,7%, 211 millones de euros, en gasto no financiero, el que importa a la gente, del Capítulo 1 al Capítulo 7 gracias a una reasignación del gasto en torno a 130 millones de euros. Esto va a posibilitar que por encima de ese 2,7% esté la sanidad, la educación, el empleo, la vivienda, la lucha contra la exclusión, la pobreza o los derechos sociales, además de los sectores económicos citados: turismo, industria, I+D+i o agricultura. En definitiva, unos presupuestos que se orientan sobre los objetivos de este Gobierno, teniendo muy presente la lucha contra la crisis climática y los objetivos de desarrollo sostenible que son el hilo conductor de la acción gubernamental”.
Rodríguez recordó, por último, que hablar de desarrollo sostenible es hablar, “en definitiva, de una sociedad más justa, para hacer una economía más productiva, diversa y vinculada a la lucha contra la crisis climática y, para en definitiva, mejorar servicios e infraestructuras”.