El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Nº2 de Los Llanos de Aridane, en la isla de Palma (Canarias), confirmó la defunción de Ángel González Acosta, de 86 años de edad. Sin embargo, este ciudadano continuaba con vida y de ello dejó constancia en las redes sociales.
González, que emigró a Venezuela hace 40 años, se vio obligado a desmentir su muerte con un vídeo que colgó en Facebook. «Hoy 23 del 9 de 2019, yo, Ángel González Acosta, declaro que estoy vivo”, aseguró el presunto difunto en la grabación.
Su muerte, en términos legales supone un grave problema para este canario, vecino de la Laguna. Según apunta su hija Angélica, su padre «no puede tramitar documentos ni tampoco el cobrar su pensión o acceder a algún derecho como le corresponde, desmejorando mucho su calidad de vida”
«Solo pedimos que termine ese proceso legal para que mi padre puede tramitar sus documentos”, concluyó sus declaraciones recogidas por el diario ‘El Día’.