Un policía que arrestó a dos menores de seis años, entre ellos una niña a la que esposó y envió a un centro de detención juvenil, después de que ésta sufriera una pataleta mientras se encontraba en el colegio, ha sido despedido de su puesto de trabajo, informó el martes la Policía de Orlando (Florida, Estados Unidos).
Dennis Turner, un agente que desempeñaba sus funciones en la escuela Lucious and Emma Nixon Elementary, fue despedido tras la investigación de los hechos que dieron como resultado el arresto de dos menores.
«En nombre del Departamento de Policía de Orlando, me disculpo con los niños involucrados y sus familias», escribió Orlando Rolón, jefe de Policía de Orlando, en un mensaje en Twitter.
Statement from OPD Chief Orlando Rolón. pic.twitter.com/qd7msBx0Fw
— Orlando Police (@OrlandoPolice) September 23, 2019
Los hechos tuvieron lugar el jueves de la semana pasada, cuando el agente arrestó a la pequeña después de que ésta se portara mal en la clase y sufriera un ataque de rabia en uno de los despechos del colegio. Turner esposó a la pequeña y la envió a un Centro de de Evaluación de Menores de la ciudad, acusada de agresión. En dicho centro, le tomaron las huellas digitales y le hicieron fotografías ante la incredulidad de su abuela, Meralyn Kirkland, quien se desplazó hasta el centro.
Tras la liberación de la pequeña, Kirkland aseguró que la niña padece de apnea del sueño, lo que le provoca estar cansada y debido a ello rompe a llorar en algunas ocasiones.
Las autoridades también informaron que Turner había arrestado a otro menor ese mismo día. El niño, también de seis años, fue puesto en libertad después de ser fichado en el citado centro de menores.
Según la leyes estadounidenses, antes de un menor de doce años sea detenido, las autoridades necesitan la aprobación por parte de un supervisor o tutor, permiso que Turner nunca obtuvo.
La Fiscalía del Estado ha asegurado que está trabajando para eliminar los expedientes de los pequeños.