La ministra de Educación y portavoz del Gobierno en funciones, Isabel Celaá, abogó este viernes por “romper entre todos el bloqueo que atenaza y no permite despegar al Gobierno”, y cargó contra el Partido Popular y Ciudadanos por no facilitar la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Ejecutivo.
En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, Celaá subrayó que “la prioridad es impedir una nueva convocatoria electoral” y, para ello, el presidente “continúa trabajando de manera incansable por un acuerdo de gobierno”, que permita que haya Ejecutivo «en septiembre».
“Hay que romper ese bloqueo que establece la derecha, que dice ser protectora de la institucionalidad española pero no se aviene a abstenerse”, dijo, y lanzó un mensaje a las fuerzas «progresistas» porque “importa mucho que consigamos ese espacio común y compartido con la izquierda” que busca Sánchez con la ronda de contactos con colectivos sociales que inició este jueves y que continuará la semana que viene.
Celaá subrayó que Sánchez es el presidente en funciones y “ahora candidato puede ser cualquiera”, pero agregó que “no hay otra alternativa” para liderar el Ejecutivo que no sea que el secretario general socialista, salvo que Unidas Podemos pacte con Partido Popular y Ciudadanos.
Aunque no es el candidato, aseguró que trabajará este mes de agosto “denodadamente” para «conseguir la confianza suficiente que le lleve a una investidura con éxito”. Presentarse a una nueva sesión «dependerá de lo que decida la Ejecutiva del PSOE” y “si esa confianza no existe, él adoptará sus decisiones”, añadió.
CONTRA PP Y CIUDADANOS
La portavoz insistió en el mensaje de las últimas semanas de presionar a PP y de CS para que, con su abstención, salga adelante la investidura de Sánchez “en septiembre”, fecha a la que aludió en varios momentos de la comparecencia.
Celaá reclamó una vez más al PP de Pablo Casado que haga “lo mismo” que se pedía al PSOE en 2016 a cambio “de nada” –aunque el PP en algún momento llegó a ofrecer un gobierno de coalición-, algo que los socialistas realizaron “con gran sufrimiento”.
Preguntada por la renuncia entonces de Sánchez al escaño por no facilitar el Goberrno de Mariano Rajoy, señaló que “las condiciones eran distintas, pero, no obstante, el PSOE se presentó y estamos hablando de fuerzas políticas, no de soluciones, respetables, pero individuales”.
En concreto, al PP le recriminó como “excusas de mal pagador” que esgrima que el Ejecutivo de Sánchez podría indultar a los condenados –si los hay- del ‘procès’ para no apoyarle.
MENOS PRESIÓN A UNIDAS PODEMOS
Celaá apenas mencionó a Unidas Podemos, la formación que lidera Pablo Iglesias, salvo para recordar que fue su “socio preferente” en el último año y que el Gobierno de coalición que se intentó “no pudo ser” porque había “dos concepciones contrapuestas” y “no puede haber dos gobiernos en uno, ya que un país necesita un solo gobierno, cohesionado, fuerte, sostenible y solvente”.
Admitió que “las contradicciones en la concepción (en la coalición) socavaron la confianza y, por ello, no pudo ser, no sólo por la concepción aritmética”, de ahí que ahora se esté en otra fórmula que pasa por “mejorar y actualizar” el programa que presentó el líder del PSOE, a través de sus contactos con los colectivos sociales, y “encontrar ese espacio común o compartido” que aúne “sensibilidades en la izquierda”.
Una vez concluya Sánchez esa ronda de encuentros con los colectivos sociales, a los que se presenta abierto a asumir “prioridades”, llegará el momento de contactar con los líderes de las principales fuerzas políticas, dijo.
(SERVIMEDIA)