Un estudio internacional liderado por investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha descrito una nueva enfermedad emergente causada por un hongo del género ‘fusarium’ que afecta a embriones de tortugas marinas y amenaza a esta especie.
Las enfermedades emergentes son unas de las principales causas de pérdida de biodiversidad y su efecto se ve aumentado por la globalización, por la dispersión de especies invasoras portadoras de patógenos y por el cambio climático.
“La descripción de esta enfermedad emergente en tortugas marinas (STEF, Sea Turtle Egg Fusariosis) alerta sobre la necesidad de controlar esta patología en el diseño de planes conservación de estas especies amenazadas, alguna de las cuales están en peligro crítico de extinción en regiones biogeográficas concretas como el Pacifico”, señaló Javier Diéguez-Uribeondo, científico del Real Jardín Botánico (CSIC) e investigador principal del estudio.
Las primeras mortalidades masivas en anidaciones de tortugas marinas fueron detectadas en Cabo Verde en 2010 por Diéguez-Uribeondo y Adolfo Marco. “Posteriores estudios de los microrganismos aislados de estas áreas afectadas permitieron conocer las especies patógenas involucradas”, agregó Diéguez-Uribeondo.
“Las dos especies patógenas pertenecen al género ‘Fusarium’ y se han detectado en todas las especies de tortugas marinas y áreas de anidación estudiadas: Australia, Cabo Verde, Colombia, Costa Rica, Ecuador, España, Estados Unidos, Gabón o Islas Ascensión”, añadió el investigador.