Repsol registró un beneficio neto de 1.133 millones de euros en el primer semestre de 2019, lo que supone una caída del 26,7% frente a los 1.546 millones del mismo periodo del ejercicio anterior, en el que se incluyó la plusvalía de 344 millones de euros proveniente de la venta de su participación en Naturgy.
Según ha informado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el beneficio neto ajustado, que mide específicamente el comportamiento de los negocios, fue de 1.115 millones de euros, un 1,5% inferior al de hace un año.
Además de la ausencia de plusvalías, Repsol apunta que “estos sólidos resultados se consiguieron en un contexto de precios más bajos del crudo, caída de los márgenes internacionales de refino y con la suspensión de la producción en Libia durante, prácticamente, la mitad del semestre”.
El negocio de Upstream obtuvo un resultado de 646 millones de euros, similar al del primer semestre de 2018, en un periodo en el que la compañía realizó el mayor descubrimiento en tierra registrado en 2019 e inició la producción del proyecto ‘Buckskin’, en el Golfo de México estadounidense.
Por su parte, el resultado de Downstream alcanzó los 715 millones de euros, frente a los 762 millones del mismo periodo de 2018. El negocio comercial continuó impulsando su actividad innovadora e inauguró el primer punto de recarga ultra-rápida de la península. Además, incorporó a su cartera tres proyectos renovables en desarrollo con una capacidad total de 800 megavatios (MW).