El mes pasado fue el junio más cálido en la Tierra desde que la serie histórica de temperaturas globales comenzara en 1880, lo que se debió en parte a la ola de calor registrada en amplias zonas de Europa, según el último informe climatológico mensual de la agencia estadounidense NOAA (Administración Nacional Atmosférica y Oceánica).
El informe, recogido por Servimedia, indica que la temperatura combinada de la superficie terrestre y oceánica en junio de este año fue 0,95ºC superior a la media del siglo XX, y rebasó en 0,02ºC el anterior récord de junio de 2016.
Nueve de los 10 junios más calurosos jamás registrados se han producido desde 2010. En esa lista se mantiene junio de 1990 en el octavo lugar. Junio de este año fue el 43º junio consecutivo y el 414º mes seguido con temperaturas por encima del promedio del siglo pasado.
Además, el planeta vuelve a romper un récord mensual de calor 33 meses después, ya que el último con niveles nunca vistos desde agosto de 2016, que puso fin a 16 meses consecutivos de temperaturas inéditas mientras se producía un fuerte episodio de ‘El Niño’.
La mayor parte de la superficie de la Tierra tuvo en junio temperaturas superiores a la media, sobre todo en Europa central y oriental, el norte de Rusia, el noreste de Canadá y el sur de América del Sur, donde los termómetros marcaron de media al menos dos grados más de lo normal en comparación con el periodo de referencia comprendido entre 1981 y 2010. También hizo más calor que de costumbre en el norte del Índico y partes del Pacífico y del Atlántico.
Por el contrario, el mes pasado hizo más frío de lo normal en partes del oeste de Asia, la Antártida y áreas del Atlántico y el Pacífico norte, así como el interior de Estados Unidos.
TIERRA Y OCÉANO
En cuanto a la temperatura de la superficie terrestre, junio tuvo 1,34ºC más que el promedio del siglo XX, lo que supone también un nuevo récord en 140 años y 0,04ºC más que junio de 2015, que ostentaba hasta ahora el dato más alto. América del Sur, Europa, África, Hawai y el Golfo de México vivieron el junio más caluroso desde que comenzaran los registros regionales en 1910. Por el contrario, América del Norte y Oceanía tuvieron el junio más frío desde 2009 y 2012, respectivamente.
La temperatura global de la superficie del océano superó en 0,81ºC la media del siglo pasado y empata el récord de junio de 2016. Además, el mes pasado fue el décimo con mayor anomalía cálida oceánica desde 1880, una clasificación liderada por enero de 2016 (+0,91ºC) y copada por meses desde septiembre de 2015.
OLA DE CALOR
Desde un punto de vista regional, Europa vivió el junio más cálido desde 1910 con una anomalía de 2,93ºC superior a lo normal, lo que se traduce en 1,95ºC más que el anterior récord de junio de 2003. Además, el mes pasado fue el primero en que la anomalía media superó la barrera de los dos grados. En la última semana del mes, una ola de calor afectó a gran parte del continente, que tuvo temperaturas entre 6 y 10 grados superiores a las habituales en muchas zonas.
En cuanto a España, el mes pasado resultó cálido en el conjunto de España y registró una temperatura media en el país de 21,4ºC, lo que supone 0,3ºC por encima del promedio del mes con 1981-2010 como periodo de referencia. Así, fue el 18º junio más caluroso desde 1965 y el 14º más cálido en lo que va de siglo, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Lo más significativo fue que 29 localidades batieron récords de calor de día y 10 de noche (algunos de ellos desde 1920) debido a la ola de calor registrada entre los días 26 y 30 de junio, de las cuales Girona, Lleida, Madrid, Navacerrada y Torrejón de Ardoz tuvieron las temperaturas más altas nunca contabilizadas desde que hay datos en esos lugares.
El mes pasado fue el junio más caluroso jamás registrado en Alemania, Austria, Chequia, Hungría y Países Bajos; el segundo en Suiza y el quinto en Francia. También se pulverizó el récord histórico mensual en Bahréin, país donde empezaron a recogerse datos de temperatura en 1902.
Por último, la temperatura media de la superficie terrestre y oceánica del planeta durante el primer semestre de este año empató con 2017 como la segunda más alta en 140 años, al ser 0,95ºC superior a la del promedio del siglo XX. Sólo el periodo entre enero y junio de 2016 (+1,11ºC) fue superior.