La riqueza financiera neta de los hogares y las instituciones sin fines de lucro al servicio de los hogares en España se situó en 1,45 billones de euros a finales de marzo de 2019, lo que supone un incremento del 4,1% con respecto al mismo periodo del año anterior.
El Banco de España publicó este lunes las cuentas financieras de la economía española correspondientes al primer trimestre del año, en las que refleja información sobre operaciones financieras y de activos y pasivos de los sectores de la economía.
En relación con el PIB, los activos financieros netos de los hogares representaron el 119,3%, una ratio que es 0,8 puntos porcentuales superior a la de un año antes.
El saldo de activos financieros de los hogares alcanzó en el primer trimestre del año un importe de 2,231 billones de euros, un 2,9% superior al de un año antes. Este aumento fue el resultado de una adquisición neta de activos financieros de 18.000 millones durante los últimos cuatro trimestres y de unas revalorizaciones netas de 45.000 millones, debidas, fundamentalmente, al incremento del precio de los activos de renta variable.
En relación con el PIB, los activos financieros totales de los hogares representaron un 183,5% a finales del primer trimestre de 2019, lo que significa 0,7 puntos porcentuales menos que un año antes.
Por componentes, el grueso de los activos financieros se encontraba en efectivo y depósitos (el 40% del total), seguido de participaciones en el capital (27%), seguros y fondos de pensiones (16%) y participaciones en fondos de inversión (14%).
El efectivo y depósitos fue el componente que más incrementó su peso en los activos financieros de los hogares (en 0,5 puntos porcentuales) con respecto a un año antes, mientras que el peso de las participaciones en fondos de inversión fue el que más cayó (-0,5 puntos).
Por su parte, el flujo neto de financiación consolidada recibida por empresas y hogares fue de 9.100 millones a finales de marzo de 2019, equivalente a un 0,8% del PIB. La financiación nueva captada por las sociedades no financieras representó un 0,6% del PIB, mientras que la recibida por los hogares fue un 0,2%.
Las operaciones financieras netas de los sectores residentes (empresas, hogares, instituciones financieras y administraciones públicas) registraron en marzo de 2019, en términos acumulados de los últimos cuatro trimestres, un superávit de 14.000 millones de euros, equivalente al 1,2% del PIB, frente al 1,5% observado en el conjunto de 2018. Obtuvieron un saldo positivo las empresas (0,9% del PIB), las instituciones financieras (2,6%) y los hogares (0,1%), mientras que las administraciones públicas mostraron un déficit del 2,4% del PIB.
La deuda consolidada de las empresas y los hogares alcanzó 1,615 billones a finales del primer trimestre de 2019, un 132,8% del PIB y 4,1 puntos porcentuales por debajo de la ratio registrada un año antes.
La deuda consolidada de las sociedades no financieras representó un 74,4% del PIB (si se incluyese la deuda interempresarial, la ratio sería un 94%), mientras que para los hogares fue un 58,4%.