El presidente del PP, Pablo Casado, descartó este martes una “abstención táctica” de su grupo parlamentario que permitiera la investidura de Pedro Sánchez porque, a su entender, la “responsabilidad” le aconseja que “no sería bueno que España se quedara sin alternativa”, la que encarna el PP.
Así comenzó la rueda de prensa que ofreció tras reunirse en el Congreso con Sánchez por espacio de algo más de una hora; su cuarto encuentro desde las elecciones generales al que dijo, marcando distancias con el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, “mi obligación es venir”.
Casado empezó diciendo que el PP va a poner “todo de nuestra parte para que se desbloquee” la legislatura, pero acto seguido matizó que “eso es compatible con que no podemos facilitar la investidura”.
Lo argumentó señalando que hay “millones” de españoles que no desean que gobierne la izquierda y “por responsabilidad”, pues “no sería bueno que España se quedara sin alternativa política”. Por tanto, confirmó: “La abstención táctica está fuera de nuestro deseo y nuestra responsabilidad. Es una decisión motivada, coherente”.
Así, concluyó: “La pelota está en el tejado de Pedro Sánchez y él tendrá que explicar por qué no se pone de acuerdo con quienes se ha puesto de acuerdo en comunidades y ayuntamientos”, en referencia a Unidas Podemos, con cuyo líder, Pablo Iglesias, se reunió esta mañana el candidato a la investidura sin acuerdo para obtener el voto a favor de este grupo.