A veces llegan juegos hasta nuestras manos sin demasiada publicidad y sin mucho cartel. Títulos como A Plague Tale: Innocence, realizado por Asobo Studio, una desarrolladora francesa autora de Recore, Zoo Tycoon o The Crew entre otros, aparecen en días marcados como salida de otras grandes franquicias. Esta vez en fecha de publicación A Plague Tale acompaña al renombrado Rage 2 y eso eclipsa un poco el lanzamiento, pero sin duda, cuando nos ponemos a los mandos del juego, vemos que este título publicado por Koch Media, es uno de los mejores del año.
El año pasado, a nuestro parecer, le tocó el galardón de Tapado del Año a Dragon Quest XI. Creo que tenemos ante nosotros al Tapado de 2019, A Plague Tale: Innocence. Este juego nos lleva a la Francia del medievo asolada por la guerra de los 100 años, donde la Santa Inquisición tenía mucho poder y las enfermedades diezmaban a la población. Los protagonista de esta historia son Amicia y Hugo, dos hermanos pertenecientes a una buena familia que tras un dramático suceso ocurrido a su mascota, deben volver a casa junto a su padre porque la Inquisición está buscando al hermano pequeño, Hugo. Amicia, la adolescente, será la encargada de huir con Hugo en busca de salvar al niño de los malvados caballeros y comenzará una historia de exploración, aventura, infiltración y puzzles.
Amicia y Hugo apenas se conocen porque Hugo vive aislado en la casa familiar cuidado por su madre y Amicia se dedica a ir de caza junto a su padre. En nuestra aventura, que ha durado algo más de 10 horas, tendremos que aprender a confiar el uno en el otro y resolver todas los obstáculos que se nos pongan por delante unidos. El único arma con el que cuentan es una honda con la que Amicia puede o distraer a los enemigos o atacarles directamente si no tienen casco. Pero esta honda y otros elementos que nos facilitarán la tarea podremos ir construyéndolos en las mesas que están disponibles a lo largo del escenario si disponemos de los materiales necesarios.
Y es que en la exploración reside cierto encanto del juego, mirar por todos los rincones para encontrar tanto los objetos como los coleccionables que nos harán profundizar en la historia. Otro de los elementos clave del juego es la infiltración. En todo momento estarás siendo buscado por La Inquisición, ya que ellos quieren al niño por alguna razón que no vamos a desvelar. Deberemos utilizar nuestro ingenio y nuestras herramientas para poder avanzar por el escenario sin ser vistos. Para ello tenemos piedras con las que golpear objetos metálicos para que suenen y el enemigo vaya a ellos dándonos así la oportunidad de escapar; tenemos jarrones que de igual manera hacen ruido, podremos cooperar con otros supervivientes que nos ayuden, también podremos escondernos en las plantas altas e incluso la oscuridad será nuestra aliada.
Pero la oscuridad es peligrosa y aquí viene otro de los puntos fuertes del juego y es que en la oscuridad las ratas nos pueden atacar. Enjambres de miles de ratas vendrán a por nosotros y nos devorarán sin miramientos. Solo tendremos la luz para asustarlas y este elemento juega en forma de puzzles para ir avanzando por el escenario sin ser devorados por los roedores. Sin duda es muy divertido y nos pone en todo momento en tensión.
La jugabilidad es en tercera persona y tendremos que ir llevando a Hugo de la mano y cuidando de él en todo momento excepto puntualmente donde colaboraremos con él para resolver puzzles como que pase por un pequeño hueco para que nos abra un acceso. No podremos dejarle mucho tiempo solo porque se pondrá nervioso y alertará a los enemigos. Estos enemigos tendrán una señal de alerta que podremos quitar en el menú para hacer las cosas más complicadas. El juego en sí no es demasiado complicado aunque si que hay momento difíciles pero nada imposible. En otros momentos nos tocará más acción y una lucha cara a cara, pero son momentos puntuales que hacen que el juego no se haga monótono.
A nivel de ambientación el juego está realmente bien localizado. Vemos como eran las casas del siglo XIV francés, cómo eran las ciudades asoladas por la peste que traían las pulgas que tenían las ratas en sus cuerpos, cómo ponían X en las puertas donde la enfermedad había acabado con una familia. Sentiremos la adrenalina de tener que huir de enemigos a los que no nos podremos enfrentar y ante los que si no corremos, estamos indefensos, el pavor de las ratas acosándonos… Realmente crea un ambiente que hacía tiempo que no veíamos. No hacen falta juegos de mundo abierto, ni gráficos de última generación para crear cosas así, con cariño y buen hacer, los chicos de Asobo Studio lo han conseguido.
Gráficamente luce bien y fluido, la dirección artística y la fotografía son geniales. Los cientos o incluso miles de ratas en pantalla con sus ojitos rojos nos ponen los pelos de punta pero el juego no permite en ningún momento que caiga la fluidez de los movimientos. Quizás no llegue al nivel de los mejores juegos por gráficos de la generación pero eso no quita que no se pueda disfrutar y no le falte detalle a los modelados.
En cuanto al sonido la música ambiental es buena y te pone en situación en todo momento. Su banda sonora también es destacable. A Plague Tale: Innocence viene doblado en varios idiomas pero entre ellos no se encuentra el español, así que un juego francés ambientado en el país galo se puede escuchar con voces autóctonas, sin embargo los subtítulos si que están en nuestro idioma y nos enteraremos de toda la historia a través de ellos si no entendemos otros idiomas.
A Plague Tale: Innocence es un excelente trabajo de Asobo Studio que nos pone la carne de gallina con las ratas, nos hace sentir cómo de duro era ser perseguido por la Inquisición y nos muestra el horror de las enfermedades que asolaban la Europa de la Edad Media. Un producto muy bien acabado, realizado con mucho mimo y que nos da unas cuantas horas de diversión sin utilizar nada revolucionario. Mezcla varios elementos bien implementados, una potente historia y con esto nos saca uno de los juegos de 2019, sin duda alguna. Koch Media sigue haciendo una gran labor trayéndonos estos juegos que nos hacen disfrutar tanto o más como los triple AAA que tanta publicidad tienen. A Plague Tale nos demuestra que a veces sin tanta publicidad se puede hacer un juego increíble que no decepciona.