Dos bebés prematuros han fallecido en los diez últimos días en el Hospital Vall d’Hebron de Barcelona como consecuencia de una inflamación intestinal complicada por la presencia de una bacteria. En previsión otros tres bebés prematuros han sido aislados.
El estado de salud de los pequeños fallecido era frágil: uno llegó al mundo con apenas 500 gramos y el otro no llegaba a los 700.
La causa de la muerte en ambos casos es una enterocolitis que se agravó por la presencia de la bacteria Klebsiella, que causó una sepsis a los bebés, tal y como ha informado ‘Cope’.