La hipertensión es un problema médico que puede acarrear consecuencias muy graves para la salud. Entre las posibles consecuencias se encuentran el infarto de miocardio, los daños en las arterias periféricas o la hemorragia cerebral. Aunque puede afectar a todo tipo de personas, es especialmente frecuente, y peligroso, entre los adultos mayores.
Se considera que existe hipertensión arterial cuando las cifras de la tensión, medidas en condiciones de reposo y sin haber tomado ningún tipo de sustancia excitante (café, alcohol, tabaco…) se encuentra por encima de 140 mm Hg la sistólica (máxima) y 90 mm Hg la diastólica (mínima). Si quieres comprobar tus niveles aquí te dejamos una comparativa de aparatos para medir la tensión.
5Cambios en la alimentación
Una de los cambios más complicados, especialmente en personas mayores, es el de los hábitos alimentarios. Los especialistas recomiendan reducir el consumo de grasas al mínimo y aumentar el de alimentos ricos en fibras.
Los dulces, por su parte, deben eliminarse, sobre todo los industriales. Lo mismo ocurre con las bebidas azucaradas, que tienen que desaparecer de la dieta.