Atendiendo a las condiciones del terreno, podrá acondicionarlo con el equipamiento ideal para mantener la humedad en temporada de verano, y así proteger sus plantas y cultivos de la ardua sequía.
En tiempos de sequía, se dispara más de lo esperado la venta de materiales de riego, debido a la cantidad de clientes interesados en mantener sus plantaciones en buen estado, evitando los daños que en el futuro podría generar dicha falta de humedad.
De tal manera que, si requiere realizar una importante inversión para nutrir sus sistemas de riego, puede acceder a los catálogos virtuales de riegopro.com, una tienda online que se especializa en la comercialización de equipos y accesorios para acondicionar parcelas.
Aunque para algunas personas el riego no sea una prioridad, de ello depende la nutrición y la fertilización de las plantas ornamentales y de los cultivos, ya sea porque se tengan en una finca o en zonas urbanas. Al no recibir las cantidades necesarias de agua, pueden secarse totalmente.
Procesos automatizados
La tecnología ha avanzado en la fabricación de un programador de riego, el cual le facilitará el proceso porque con un mecanismo electrónico se encarga de automatizar el riego, accionando el mismo de acuerdo con la configuración que indique el usuario.
Para mayor protección, seleccione el que más se adapte a su localización y solicite la ayuda de un profesional en caso de que sea necesario. La ventaja de este dispositivo es que se activa al indicarle la hora, el día y el tiempo de riego, combinando los diferentes tipos de arranque que contempla el manual de uso.
Como existen infinidad de modelos en el mercado, realice su compra basándose en el tamaño del terreno y en la amplitud del mismo, ya que de ello depende que sea fácil o complejo lograr los resultados que se esperan. Si requiere algún tipo de accesorio, podrá acoplarlo para mayor comodidad, puede instalar pantallas LCD, reguladores de caudal y sensores climáticos.
Adicionalmente, los programadores reúnen otras características que tienen que ver con el funcionamiento. Unos son analógicos, otros digitales y se pueden conectar fácilmente a una red wifi o por bluetooth, para que pueda gestionarlo desde su tablet o su dispositivo móvil.
Evaluar el terreno es vital, ya que algunas partes requieren mayor cantidad de agua que otras y el exceso de humedad podría ser perjudicial para las plantas. La eficiencia está sujeta a la precisión, pues cada cultivo tiene sus necesidades específicas.
Cómo determinar la eficiencia de un sistema
En primer lugar, fije una programación que le permita seguir de cerca los resultados. Si tiene amplias extensiones de terreno, un cálculo preciso le permitirá ajustar las cantidades de agua para evitar la escasez y la sobrecarga en el caudal.
Con el objetivo de alcanzar un alto rendimiento durante la cosecha, debe existir equilibrio entre el sistema de riego, la adquisición de semillas de calidad, los fertilizantes y otros elementos.
Al mismo tiempo, las pruebas que vaya efectuando sobre el terreno le permitirán medir la uniformidad, en aras de poder ajustar la distribución y el funcionamiento de los aspersores, chequeando a medida cuánta agua está recibiendo el cultivo. Según la regla, si el coeficiente de uniformidad es menor de un 80 por ciento, existen fallos en el suministro del caudal.
La calibración le permitirá corregir fallos en la presión y detectar fugas que podrían causar gran derroche de agua. Es recomendable que periódicamente realice una revisión del sistema de riego para regular el consumo, midiendo el caudal y la presión, aparte de la energía de los equipos y el nivel de combustible.
Para evitar el desgaste, es prudente efectuar el mantenimiento periódico de las boquillas, los controles y los medidores, pues todo ello incide en la eficiencia del sistema y, por ende, podría estar ocasionando pérdidas por falta de uniformidad.
Por último, evite la formación de charcos de agua, observando el grado de absorción del suelo. Si el terreno es sumamente seco, se requiere tiempo para generar la humedad adecuada. Todo varía según el alcance, ya que intervienen una serie de factores variables como la dispersión y la evaporación.