El Pleno del Tribunal Constitucional ha decidido por unanimidad y por ser prematuro inadmitir el recurso de amparo presentado por los exconsejeros de la Generalitat de Cataluña Meritxell Serret y Antoni Comín contra el Auto de 13 de junio de 2018, dictado por el magistrado instructor de la Sala Penal del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, por el que inadmitió su propia recusación y contra el Auto de 4 de julio de 2018, que inadmitió a trámite la solicitud de nulidad de actuaciones presentada contra aquella inadmisión.
El Tribunal considera que el recurso es prematuro por falta de agotamiento de la vía judicial previa. La parte dispositiva de la sentencia que “en atención a todo lo expuesto, el Tribunal Constitucional, por la autoridad que le confiere la Constitución de la nación española, ha decidido inadmitir el recurso de amparo formulado por doña Meritxell Serret Aleu y don Antoni Comín Oliveres”.
Serret y Comín habían presentado un recurso contra el auto del 13 de junio del 2018 dictado por el propio Llarena, donde rechazaba los escritos de las defensas que pedían su propia recusación. También habían recurrido otro auto del 4 de julio del 2018 donde el magistrado rechazaba la solicitud de nulidad de las actuaciones presentada contra la primera decisión.
Los dos exmiembros del Gobierno de Carles Puigdemont, presentaron este recurso por considerar que el juez no era imparcial, ya que todos ellos habían presentado una demanda civilmente en Bélgica contra Llarena.
Según el escrito de recusación presentado por los dos cosejeros huidos de la justicia española, ambos habrían sido objeto de “una campaña de descrédito por su condición y sus funciones políticas» que habría consistido en «una persecución judicial y mediática» vulneradora de su derecho a la presunción de inocencia y limitadora de sus derechos políticos.
