La superpoblación en China ha llevado a una de las funerarias más famosas del país asiático a idear un plan alternativo para el tratamiento de las cenizas de los difuntos, que según la compañía podrían transformar éstas en diamantes.
Zhou Weihua, subdirector de la funeraria de Babaoshan (Beijing), dijo en declaraciones a ‘Beijing News’ que está ofreciendo a sus clientes convertir las cenizas de sus seres queridos en gemas que se pueden utilizar para colgarlas en un collar u otro complemento. Aseguró que algún día podrían transformarse en diamantes, un comentario que desató la polémica en las redes sociales.
«Es horrible. No puedo aceptar usar las cenizas de mis familiares», protestó una internauta en ‘Weibo’.
Al parecer la gran cantidad de ciudadanos que habitan en China supone un peligro en el uso de la tierra.
El Ministerio de Asuntos Civiles predijo en 2015 que los terrenos disponibles para los cementerios en la mayoría de las provincias del país se agotarán en 10 años, informó la agencia ‘Xinhua’. En 2015 el 85% del territorio destinado para el inhumación de restos estaba completado.