El Gobierno español mostró este jueves su “profunda preocupación” por la sentencia que agrava la condena contra Nasrin Sotoudeh, defensora iraní de los derechos humanos, en general, y de los derechos de la mujer, en particular.
El Ministerio de Asuntos Exteriores emitió un comunicado en el que expuso que la “legítima actividad” de los defensores de los derechos humanos y su “protección” representa una de las “prioridades” de la política exterior del Gobierno.
Subrayó que para el desarrollo de su actividad es “esencial” la garantía de las libertades de expresión y manifestación, que están consagradas en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, del que Irán forma parte.
Por último, instó a Irán a dar pasos en la lucha contra la discriminación y en favor de los derechos de las mujeres y su participación efectiva en todos los ámbitos.
La abogada y defensora de los derechos humanos iraní Nasrin Sotoudeh ha sido condenada a una pena de prisión que, según las fuentes, oscila entre los siete años y los 33 años y 148 latigazos.