El programa ‘Espejo Público’ ha divulgado las declaraciones de los dos senderistas que fueron citados como testigos en el caso de Julen, el pequeño que falleció tras caer en un pozo ilegal en Totalán (Málaga). Ellos fueron las dos primeras personas que acudieron al lugar del hechos al escuchar los chillidos de la familia.
En su declaración ante el juez aseguraron que encontraron muy nerviosos a los familiares y que llegaron a temer que la madre del pequeño, Victoria, se pudiese quitar la vida.
En las imágenes divulgadas por el programa de ‘Antena 3’, Francisco Javier aseguró que la mujer le contó que ya había perdido a un hijo y que no podría permitir que volviera a pasar. Al escucharla decir eso decidió quitar «los cuchillos que había por ahí.
Por otra parte, y según su relato, el padre intentó meter en el pozo un tubo, pero él le advirtió que podía ser más peligroso para el niño. En cuanto al pozo, el hombre rechazó haber visto ninguna piedra junto a él.
La mujer senderista, por su parte, declaró que al conocer lo sucedido se tumbó en el suelo y comenzó a hablar, con la intención de que el niño le escuchara «y estuviera tranquilo».