Escuelas Católicas calificó de “escasa” la repercusión de la huelga feminista de este viernes y señaló que la atención de los alumnos ha transcurrido con “normalidad” en sus centros.
En un comunicado difundido con motivo del 8-M, la federación apostó por la educación en valores para erradicar conductas discriminatorias y rechazó “cualquier tipo de desigualdad o discriminación”.
La organización, según los datos recogidos durante la mañana de este viernes, recalcó que el porcentaje estimado de los profesores y personal no docente de sus centros que han secundado la huelga estaría en torno al 0,5%, y que “la normalidad en la atención a los alumnos ha sido la tónica general”.
Del mismo modo, Escuelas Católicas considera que “una huelga no es el cauce adecuado para la consecución de este fin, sobre todo teniendo en cuenta que estos asuntos ya están siendo objeto de negociación en diferentes mesas y comisiones, incluidas iniciativas legislativas en tramitación”.
“Ni mucho menos comparte que bajo la defensa de la igualdad de la mujer se intenten introducir otros elementos que responden a motivaciones políticas ajenas a la misma, entre ellas, la exigencia de una educación pública y laica, repitiendo fuera de contexto una consigna que constituye un ataque contra la libertad de enseñanza”, recalcó Escuelas Católicas.
En este contexto, recordó que “colabora activamente por la inclusión, no solo de la mujer, sino de cualquier colectivo en peligro de exclusión” y que también apuesta “por leyes que defiendan y promuevan la igualdad de hombres y mujeres, y la educación en determinados valores que contribuyan a erradicar conductas y mentalidades contrarias a ese principio”.