El Gobierno es consciente de que no tiene la mayoría necesaria para asegurar la convalidación en el Congreso de los Diputados de los decretos ley que tiene previsto aprobar antes de las elecciones generales del próximo 28 de abril, dadas las reservas que expresan varios de los grupos parlamentarios que serían sus potenciales aliados en esas votaciones.
Así, fuentes socialistas reconocen que la mayoría es «muy ajustada» y que es «difícil» asegurar el apoyo necesario para esas convalidaciones. Además de las reservas de algunos grupos, asumen que la proximidad de la campaña electoral aumenta las posibilidades de que puedan faltar diputados en las votaciones, ya que muchos de ellos estarán viajando esos días por actos de partido.
La portavoz de Unidos Podemos, Irene Montero, reconoció que el Gobierno tiene “legitimidad” para aprovechar este recurso, aunque le sirva para atraer votos, y dijo que la posición de su grupo cuando los decretos lleguen a la Diputación Permanente del Congreso se decidirá según el “contenido” de los mismos. Si incorporan las medidas que creen necesarias, Unidos Podemos los aprobará, pero si son “pantomima” y “campaña electoral”, no lo hará.
El portavoz adjunto de ERC, Gabriel Rufián, mostró la voluntad de su formación de seguir haciendo como en toda la legislatura y apoyar “cualquier iniciativa que esté por dignificar la vida de la gente”. Mismo argumento expuso el representante de Bildu, Oskar Matute. para expresar el apoyo a los posibles reales decretos leyes que lleve el Gobierno a la Diputación Permanente para su ratificación.
Por otra parte, el diputado del PNV Aitor Esteban apuntó que, aunque hay “precedentes”, “no debería ser lo habitual” que la Diputación Permanente se encargue de la convalidación de los reales decretos leyes del Ejecutivo. Aunque alertó que “hay que votar si o no a todo el texto” porque ya no hay posibilidad de la tramitación como proyecto de ley y meter enmienda por lo que no aprobarán salgo que estén de acuerdo en su “integridad”.
El portavoz del PDECat, Carles Campuzano, aseguró que Sánchez “cometió un error” que afectó al interés general al convocar las elecciones generales el 28 de abril y no prolongar la legislatura hasta otoño, lo cual habría permitido dar tiempo a los proyectos legislativos a punto de culminar o a procesos de diálogo que podrían terminar con acuerdos.
Aseguró que convalidar decretos en la Diputación Permanente “no nos gusta desde el punto de vista formal” e irán valorando cada uno en función de su contenido. Considera que la mejora del subsidio para parados mayores de 52 años es “razonable”, como incrementar el permiso de paternidad, pero denunció que el Gobierno ha tenido “muchos meses” para hacerlo sin tener que esperar al “tiempo de descuento”, y el debate habría sido “mucho más sosegado y formalmente mucho más pulcro” de lo que va a ser.
Finalmente, el portavoz de Compromís, Joan Baldoví, se mostró dispuesto a aprovechar lo que queda de legislatura y pidió a Sánchez “que termien el trabajo que nos ha quedado pendiente”, porque “este tiempo de descuento también es partido”. En particular, mencionó las medidas para derogar la reforma laboral y algunos aspectos de la ley mordaza.