Los padres de Julen, el pequeño de dos años que falleció tras caer en un pozo en una finca del municipio malagueño de Totalán, comparecen este lunes ante el juzgado de Instrucción número 9, de Málaga, que investiga el caso.
José y Victoria han sido citados para declarar como testigos a petición de la Fiscalia, en relación con la muerte del niño, una vez que la Guardia Civil remitió sus informes.
En esta misma sesión está previsto que comparezca también la pareja del propietario de la finca, David Serrano, que es el único investigado por un presunto delito de homicidio imprudente. Los interrogatorios precisamente, se abrieron el pasado viernes, con la declaración de Serrano que se ratificó en que había tapado el pozo y que la caída era imprevisible.
En los próximos días el juzgado citará también a declarar en calidad de testigos a los tres senderistas que fueron los primeros en llegar y prestar auxilio a la familia tras la caída del niño.
Julen se precipitó en el interior del pozo ilegal el 13 de enero, en la finca de un familiar donde habían ido a pasar el día. Su cuerpo fue rescatado sin vida el 26 de enero a unos 70 metros de profundidad.