El acoso a la enseñanza en castellano que se produce en algunas zonas de España parece no tener fin.
El último caso conocido nos sitúa en Ibiza, donde un profesor del colegio Can Raspall, no ha tenido ningún reparo en vestirse durante años de payaso a la hora de impartir las clases de castellano a los niños de primaria.
Bajo el nombre de Godofredo, intenta «ridiculizar» está asignatura, tal y como denuncian varios padres al diario ‘El Mundo’.
Tras las quejas de muchos padres intervino la Inspección que, lejos de solucionar el problema, indignó todavía más a los padres. La inspectora ordenó que se pusiera cristales a las gafas y que se quitara el nombre de Godofredo. Sin embargo permitió que se siguiera vistiendo de payaso para dar sus clases.
Ahora se hace llamar Pepe y según cuenta, ha impuesto un modelo nuevo de enseñanza.