El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mantiene su “hoja de ruta” y esperará “hasta el miércoles” para ver como se desarrolla el debate sobre las enmiendas de totalidad del proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado para decidir sobre la fecha de las elecciones generales.
Si como todo indica el Congreso rechaza las cuentas que presentará el Ejecutivo, fuentes gubernamentales y socialistas indicaron a Servimedia que el presidente decidirá este «miércoles» cuándo serán las generales. Pero en tal caso, desde el Gabinete que dirige Pedro Sánchez apuntaron a esta agencia que “no hay elecciones” para el 14 de abril. Precisamente, la publicación de esa fecha generó cierto revuelo y levantó las alarmas en presidentes y líderes territoriales del partido.
Alguno lo veía como “un tiempo para los psiquiatras” por la velocidad de los acontecimientos y por el empleo de amagar de manera “muy fuerte” con elecciones dentro de poco y antes de las autonómicas del 26 de mayo, solo por enviar un “mensaje” a los partidos independentistas para que apoyen los Presupuestos.
La sorpresa de que abiertamente se diera cita para las generales saltó antes de que la portavoz parlamentaria y vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, compareciera en Ferraz “reventando” el mensaje contra la manifestación del PP, Ciudadanos y Vox que quería lanzar, según reconocieron fuentes socialistas.
Así, desde la dirección socialista insistían en que “primero hay que decidir si vamos a elecciones” que según aseguraban a Servimedia, “no hay nada decidido” y dependerá del debate presupuestario. Pero en todo caso veían “muy precipitado” hablar de fechas porque todavía no habían llegado a esa pantalla.
Esta situación desveló, según fuentes de Ferraz, que la puesta en circulación de fechas para las generales se ha lanzado desde Moncloa sin tener en cuenta la estrategia del partido y recuerdan que el PSOE es el “instrumento” para continuar al frente del Ejecutivo. “El Gobierno pasa, el partido lleva 140 años”, recuerdan.
Si bien, desde el Gabinete de Sánchez insisten en que el presidente es quien está al frente de la estrategia y que sólo él decide la fecha de las elecciones, ahora más aun pues lleva el “todo control” de la situación tras el portazo de las negociaciones con los partidos independentistas.
El presidente siempre ha tenido marcado el debate sobre las enmiendas a la totalidad como el trance que marcará el futuro su legislatura. Así, fuentes gubernamentales indicaban ya en diciembre que para el Gobierno era “importante” presentar los Presupuestos, pero “más aún salvar” el debate de las enmiendas a la totalidad para «evitar la imagen» de que el Congreso devuelve el proyecto. Algo así podría abocar a Sánchez a convocar elecciones generales, pero por si acaso en La Moncloa tenían y tienen ya preparado como argumento que “son los demás los que no les dejan implantar las medidas sociales” anunciadas, lo cual usarían también como mensaje electoral. Pero seguian con la estrategia de «partido a partido», a la espera de ver el transcurrir de los acontecimientos.
El PSOE está desde principios de año en clave “electoral”, no tanto por la cita ya prevista del 26 de mayo con elecciones municipales, autonómicas y europeas, sino porque en ellas se examina “la papeleta” de Sánchez, esté o no sobre la mesa. De hecho, el presidente está desarrollando una intensa agenda con actos casi todos los sábados y domingos de 2019 para palpar el ambiente en los territorios y movilizar las estructuras. Este sábado se prepara un acto en Sevilla y el domingo en Mérida.