La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, aseguró este martes a ERC y PDECat que el Gobierno no cederá “a ningún chantaje” y “no va a admitir bajo ninguna circunstancia que en ningún orden del día esté el derecho de autodeterminación para Cataluña”, al considerar que “sería nocivo para España y especialmente para Cataluña”.
Así lo aseguró en el Pleno del Congreso de los Diputados durante su intervención en el debate de totalidad de los Presupuestos Generales del Estado para defender el proyecto de cuentas públicas, en cuyo inicio se centró especialmente en referirse a las dos formaciones independentistas catalanas, que han presentado enmienda a la totalidad para rechazar el proyecto de cuentas públicas. La ministra criticó la “ensoñación” de estos partidos sobre “que el Gobierno iba a aceptar lo inaceptable a cambio de su apoyo”.
“Se equivocaron”, afirmó, añadiendo a continuación que sus exigencias son “radicalmente incompatibles” con el objetivo del Ejecutivo y que “es imposible que adoptemos medidas o actitudes ajenas a las competencias constitucionales o que atenten contra la división de poderes y los principios y valores fundamentales del orden constitucional”. En este sentido, Montero indicó que el Gobierno socialista “siempre ha apostado por la vía del diálogo político dentro del marco de la Constitución” y que “ese ha sido siempre el límite”.
Por otro lado, Montero señaló que “me hubiera gustado que este debate no se hubiera producido en la semana de inicio del juicio del ‘procés’”, al considerar que “ha podido influir en la polarización de los distintos posicionamientos políticos, dificultando en extremo el debate serio y reflexivo que se necesita en el debate sobre los Presupuestos que este país necesita”. En cualquier caso, la titular de Hacienda destacó el papel de la justicia “como poder independiente que organiza su actividad en los plazos que considera mejor”.
Además, la ministra también denunció el interés electoralista y la “irresponsabilidad de PP y Ciudadanos” y que, ante la mayoría parlamentaria que suman las formaciones que han presentado enmiendas a la totalidad a los Presupuestos, “todo indica que el independentismo votará en contra de unos PGE sociales buenos para Cataluña y la derecha en contra de unos PGE sociales buenos para España”. “Viven más en la confrontación que en las soluciones”, les echó en cara a las cuatro formaciones.
Montero reivindicó el espíritu del consenso y del diálogo como guía para avanzar como sociedad 40 años después de la aprobación de la Constitución, y criticó por ello a quienes elogian al expresidente del Gobierno Adolfo Suárez «pero se muestran en las antípodas con su comportamiento» y vierten «la misma catarata de insultos y descalificaciones» que él sufrió pero ahora contra Pedro Sánchez.
Juzgó «lamentable» que algunos partidos se intenten erigir como «propietarios» de la Constitución, que solo pertenece a los ciudadanos. «No tienen derecho a utilizarla ni a manosearla como arma arrojadiza para generar enfrentamiento y división», les dijo. En ese sentido, alertó de que algunas posiciones «no se sostienen», como acusar de ilegitimidad a un gobierno elegido por un proceso plenamente constitucional, como es la moción de censura.
Llamó por ello a la responsabilidad y aseguró que el Gobierno se siente obligado a tratar de «revertir esta situación, rebajar la tensión y reconstruir puentes», como considera que le compete a todas las formaciones políticas, ya que «la mayoría de españoles quiere rebajar la crispación y encontrar una solución pacífica y dialogada» a la situación en Cataluña.