Varios colectivos y activistas LGTB han mostrado su enfado con Ciudadanos por portar banderas del arcoíris y ‘trans’ en la manifestación de ayer, domingo, convocada por PP, Cs y Vox contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al entender que brindan apoyo a formaciones “que les quitarán sus derechos”.
“Esto es la regeneración democrática de la que hablan. Llevan banderas trans y LGTB, las banderas de la diversidad y de la igualdad para dar color a la España en blanco y negro a la que apoyan. No nos representan”, transmitió el expresidente de la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (Felgtb) Toni Poveda en redes sociales.
El también expresidente de la Felgtb Jesús Generelo se expresó en líneas similares y se declaró “muy triste” por que “personas LGTB se fotografíen y apoyen en su carrera al poder a políticos que les quitarán sus derechos más fundamentales a la primera oportunidad que se les ofrezca”.
No obstante, desde la asociación Arcópoli, su coordinador, Yago Blando, hizo hincapié en que la bandera LGTB no es patrimonio sólo de algunos. “Nosotros no vamos a decir en qué momento pueden usar la bandera LGTB; el poder usarla entra dentro de la libertad de cada uno”, defendió este activista en declaraciones a Servimedia.
Uno de los escritores de literatura LGTB más populares entre los adolescentes, Mike Lightwood, enmarcó el uso de las banderas como “pinkwashing” -que se define como el uso de la causa LGTB para blanquear otras posturas- en lo que definió como una “mani facha”.